«Hace cinco años se decía que el bloque era una acción fallida y no tenía mucho futuro, pero la realidad es que avanzamos, con dificultades pero avanzamos, y Brasil pasó de 10 billones de dólares de comercio en 2003 a 24 billones de dólares en la actualidad», aseguró el mandatario al intervenir en la cumbre del bloque en Montevideo.
El presidente de Brasil, Luis Inácio Lula da Silva, afirmó este martes que el Mercosur es en la actualidad «como un hijo al que no siempre le vemos los defectos», en un discurso durante la cumbre del grupo regional que se celebra en Uruguay.
«Hay problemas de burocracia en el bloque y problemas de otro tipo, pero a veces vemos al Mercosur como un hijo al que no siempre se le notan los fallos, que los hay y debemos reconocer», agregó el presidente brasileño.
Lula, que en más de una ocasión destacó su condición de «decano» entre los presidentes del bloque, dijo que «pese a los evidentes progresos logrados por el Mercosur en sus 16 años de vida, sigue teniendo muchos enemigos y detractores».
«Hace cinco años se decía que el bloque era una acción fallida y no tenía mucho futuro, pero la realidad es que avanzamos, con dificultades pero avanzamos, y Brasil pasó de 10 billones de dólares de comercio en 2003 a 24 billones de dólares en la actualidad», aseguró.
El presidente de Brasil, invitó a la presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, que asume la presidencia «pro tempore» del bloque en esta cumbre para ejercerlo en el primer semestre de 2008, a que «se defina una agenda concreta que abarque los problemas de asimetrías en el bloque y evitar la doble tributación de impuestos».
Lula dijo, además, «que los tiempos políticos no son los tiempos técnicos» en la búsqueda de soluciones a las dificultades.
«Los presidentes debemos reunirnos todas las veces que sean necesarias para superar los problemas y reafirmar las decisiones políticas», agregó.
El mandatario brasileño destacó que el Mercosur «tiene enemigos internos y externos» pero «si no avanzamos más rápido, si no caminamos más deprisa no es culpa de Estados Unidos, de Alemania ni de ningún país de fuera del bloque sino de nosotros mismos».
Según Lula da Silva, para poder avanzar en superar las dificultades internas del bloque «se debe elevar la mira y dejar de lado las críticas y presiones» de los sectores empresariales e industriales que cada gobierno puede tener en sus países.
«Hay que pensar en toda la economía, no en sectores concretos o de mayor peso, sino en el beneficio global que el Mercosur supone para nuestros países y la región», afirmó.
Lula señaló que «pese a las dificultades y problemas, que reconocemos, soy muy optimista sobre el futuro del Mercosur». EFE
