Publicidad

España: Chilenos acusados de agredir a agente denuncian maltrato policial

Acusados hicieron la denuncia en la Audiencia de Barcelona, donde comenzó este lunes el juicio contra los tres jóvenes, para los que el fiscal pide 11 años de cárcel por supuestamente haber provocado las lesiones a un agente en febrero de 2006.


Los dos jóvenes chilenos y un argentino acusados de agredir a pedradas a un agente que controlaba una fiesta okupa en Barcelona y que, debido a las lesiones, está en estado vegetativo, negaron la agresión y denunciaron maltrato policial antes y después de su detención.



Los acusados hicieron la denuncia en la Audiencia de Barcelona, donde comenzó este lunes, en medio de una gran expectación, el juicio contra los tres jóvenes, para los que el fiscal pide 11 años de cárcel por supuestamente haber provocado las lesiones al agente de la guardia urbana de la capital catalana el 3 de febrero de 2006.



Rodrigo Andrés L.H., y Alex C.A., ambos de nacionalidad chilena, y Juan Daniel P.G., de origen argentino, permanecen en prisión provisional desde entonces.



En la primera jornada del juicio, los acusados negaron haber lanzado piedras o haber agredido a los agentes y denunciaron que fueron los policías los que les pegaron a ellos con sus porras.



En concreto, Rodrigo Andrés, acusado por el fiscal de haber lanzado la primera piedra que alcanzó al policía, declaró que él no había tirado ninguna piedra y que, en cambio, fue golpeado por un agente en la cabeza «sin ningún motivo».



Rodrigo Andrés dijo que aquella madrugada se dirigía a la estación de tren para ir a buscar su novia y que lo hacía en compañía de unos conocidos, entre ellos los otros dos principales acusados, con los que había asistido a una fiesta junto a su madre y a su hermana.



Al igual que Rodrigo Andrés L.H., tanto Alex C.A. como Juan Daniel P.G. coincidieron al afirmar que no lanzaron ningún objeto contra los agentes y que se vieron inmersos en una tumultuosa trifulca cuyo origen desconocen y de la que se consideran víctimas.
Los tres dijeron que se dirigían a la estación ferroviaria aunque, tanto Alex como Juan Daniel, admitieron que cuando oyeron la música que procedía de la casa okupa intentaron acceder sin éxito a la fiesta.



Frente a la casa okupa se agrupaba una veintena de jóvenes que tampoco podía acceder a la fiesta -donde había unos 300 jóvenes-, por lo que se empezó entonces una discusión con los agentes que custodiaban el edificio.



Los tres sostienen que sin quererlo se vieron involucrados en la trifulca y que lo que hicieron fue tratar de huir porque vieron caer varios artefactos desde el balcón de la casa -no desde la calle- y porque los agentes les golpearon con sus porras.



En cambio, otros cuatro detenidos que sí estaban en la fiesta, -Heike B., Jordi M.G., Alejandro C.R. y Silvia R.O.-, y que están acusados por la fiscalía de provocar heridas leves a otros agentes, negaron que del interior de la casa se lanzaran objetos a los policías y dijeron que también habían sido detenidos sin motivo ya que, al tratar de abandonar la casa, se vieron envueltos en el enfrentamiento y fueron agredidos por los agentes.



Los otros dos acusados, Patricia H.M. y Alfredo Carlos P.M., negaron su participación en los hechos y aseguraron incluso que no estaban en la zona ya que, según su relato, fueron detenidos en el Hospital del Mar, donde habían ido en ambulancia tras sufrir un accidente con su bicicleta.



A la sesión de este lunes, que se prolongará al menos hasta el próximo viernes, acudieron como observadores el embajador de Chile en España, Osvaldo Puccio, el cónsul de Chile en Barcelona, Marcelo Aguirre, así como el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Senado, Jaime Naranjo (PS), entre otros.



Al término de la sesión, Puccio declaró a la prensa que se había trasladado a la sala para dar «cercanía» a sus compatriotas, mostró su «plena confianza» en la justicia española y envió un mensaje de apoyo al agente herido.

Publicidad

Tendencias