Además de reforzar la inmunización en las áreas de riesgo, un distrito de San Lorenzo, municipio vecino a Asunción, y dos pueblos del departamento de San Pedro (centro), las vacunas también serán enviadas a Alto Paraná, Amambay e Ttapúa.
El ministro paraguayo de Salud, Óscar Martínez, anunció hoy que las vacunaciones contra la fiebre amarilla se extenderán este lunes a las poblaciones fronterizas con Argentina y Brasil con las dosis donadas por varios países de la región.
Una partida de 800.000 vacunas llegaron hoy desde Brasil, por la tarde se espera otro embarque de 144.000 dosis cedidas por Perú y entre el lunes y el martes arribará un cargamento de 100.000 que ha sido ofrecido por Venezuela, afirmó el ministro.
«En total vamos a tener 1.044.000 dosis y los técnicos de la OPS (Organización Panamericana de la Salud) y los epidemiólogos del Ministerio están haciendo una estrategia de vacunación para el país», dijo Martínez en el aeropuerto internacional Silvio Pettirossi durante la recepción de las vacunas brasileñas.
Adelantó, sin embargo, que además de reforzar la inmunización en las áreas de riesgo, un distrito de San Lorenzo, municipio vecino a Asunción, y dos pueblos del departamento de San Pedro (centro), las vacunas también serán enviadas a Alto Paraná, Amambay e Ttapúa.
Las regiones de Alto Paraná (este) y Amambay (noreste) hacen frontera con Brasil, mientras que Itapúa (sur) con Argentina.
Paraguay está en emergencia nacional por 90 días, declarada ayer viernes ante el riesgo de una epidemia de la fiebre amarilla, una enfermedad desconocida en el país desde hace 34 años, por los brotes detectados en Laurelty, un barrio de San Lorenzo, a 20 kilómetros de Asunción, y en dos pueblos de San Pedro, situados a unos 250 kilómetros al norte de la capital.
Víctima
Una mujer de 39 años de Laurelty, vecina de un joven de 25 años que murió hace una semana probablemente de fiebre amarilla, falleció hoy en un hospital de Asunción a causa de complicaciones hepáticas, renales, ictericia, fiebre y vómitos con hemorragia, según fuentes médicas.
«La mujer que falleció esta madrugada está como caso sospechoso. Quisimos hacer la autopsia pero sus familiares no quisieron, (por eso) estamos recurriendo al juez de turno y para hacer la necropsia», indicó el ministro.
Esos casos se suman a otros tres registrados como probables en Luque, localidad vecina a San Lorenzo, y dos pacientes localizados en J. Augusto Saldívar, a 20 kilómetros al sur de Asunción, que padecen síntomas compatibles con la enfermedad, cuyo virus se transmite por la picadura de un mosquito del género «aedes», que en las ciudades es el mismo que propaga el dengue.
Además, un campesino de 25 años falleció el 1 de febrero pasado en un hospital de Asunción luego de ser trasladado de un pueblo del departamento de San Pedro, la primera región donde surgió el mal y en la que se han confirmado al menos cinco casos.
Por otro lado, la larga fila de personas continuaba este sábado ante la sede del único centro de salud habilitado en Asunción, después de que las autoridades levantaran anoche la restricción por la que sólo podían vacunarse los que deben viajar al extranjero o a países donde la fiebre amarilla es endémica.
Desde la aparición del mal se suceden airadas protestas en las puertas de hospitales y dispensarios públicos porque las vacunas acaban en pocas horas, y cientos de residentes capitalinos y sus alrededores han optado por buscar vacunas incluso en la localidad fronteriza de Clorinda, en la provincia argentina de Formosa.
EFE
