Se trata de la primera vez en su historia que Brasil dejó de ser un deudor a nivel internacional para convertirse en acreedor
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, afirmó este lunes que Brasil dio un importante paso para entrar en el grupo de las grandes economías del mundo al alcanzar este año reservas internacionales que superan el total de su deuda exterior.
«Eso significa que Brasil dio un paso muy importante para transformarse, definitivamente, en un país que tiene que ser considerado como serio en el mundo financiero», aseguró el gobernante en su programa semanal de radio.
Lula aprovechó el programa para destacar el anuncio hecho la semana pasada por el Banco Central en el sentido de que las reservas internacionales, por cerca de 190.000 millones de dólares, superaron en enero el total de la deuda exterior del país, que era de 186.000 millones de dólares.
Fue la primera vez en su historia que Brasil dejó de ser un deudor a nivel internacional para convertirse en acreedor.
«Brasil siempre fue un país deudor. Ahora tenemos reservas superiores a todo lo que el Gobierno debe y a todo lo que la iniciativa privada debe en el exterior. Tenemos un saldo positivo de 4.000 millones de dólares», dijo el jefe de Estado.
«Eso es resultado de la seriedad, de la estabilidad económica. Es una demostración que vamos a transformar este país, definitivamente, en una gran economía, en una gran nación», agregó.
Según el presidente, Brasil finalmente encontró un equilibrio para garantizar un ciclo de crecimiento económico por muchos años y hacer frente a crisis internacionales como la que amenaza ser provocada actualmente por Estados Unidos.
Tal equilibrio se basa en crecimiento económico con inflación controlada, así como en crecimiento del crédito y del mercado interno.
Agregó que Brasil consiguió aumentar sus exportaciones y diversificar sus clientes para no depender exclusivamente de Estados Unidos o de Europa.
«Y eso nos da tranquilidad para hacer frente a la crisis estadounidense. Muchas personas imaginaban que por esa crisis Brasil iría a quebrar. Pero Brasil está mostrando solidez y hasta el momento la crisis estadounidense no llegó y no va a llegar, y, si llega, estamos preparados para enfrentarla», afirmó.
«Es todo lo que el pueblo brasileño necesita: tranquilidad y seriedad para que podamos recuperar los veintipocos años que la economía brasileña no mereció el respeto internacional», dijo.
Sobre el crecimiento económico, aseguró que Brasil cerró el año pasado con una expansión del 5 por ciento y que ese mismo nivel se mantendrá en 2008 y en los próximos años.
«Las condiciones están dadas para que podamos crecer más que eso. Pero es importante que ese crecimiento sea muy responsable, porque no podemos tener una economía creciendo exageradamente y con un consumo creciendo por encima de nuestra capacidad productiva, porque eso provoca inflación», dijo.
«Es importante que crezcamos de forma equilibrada y constante. Si la economía brasileña crece durante 10 o 15 años a tasas del 4,5, 5,0, 5,5 o 6,0 por ciento con inflación controlada vamos a elevar la masa salarial, lo que está ocurriendo, y vamos a reducir el desempleo, a aumentar el crecimiento industrial y a continuar exportando más», agregó.
Para sustentar sus previsiones, recordó que la industria brasileña creció el año pasado un 6 por ciento gracias a la expansión del crédito y de la demanda doméstica.
«Estamos cosechando ahora lo que fue construido a lo largo de muchos años, con errores de otros gobiernos y con errores y aciertos nuestros», dijo.
EFE
