«Usábamos botas marquilla ecuatoriana, se utilizan explosivos, municiones ecuatorianas, desodorantes y algunas drogas (medicinas) brasileñas, cremas dentales y jabones venezolanos», señaló ex rehén de la guerrilla izquierdista.
La guerrilla de las FARC se mueve por las fronteras de Colombia con Brasil, Ecuador, Perú y Venezuela, y recibe suministros procedentes de esos países, afirmó este jueves uno de los cuatro ex congresistas liberados el miércoles por ese grupo.
El ex rehén Luis Eladio Pérez dijo en declaraciones a la cadena bogotana Caracol Radio, que lo contactó por teléfono en Caracas, que los rebeldes lo movieron por los límites de esos países durante los más de seis años que estuvo cautivo.
«Yo dormí en el Ecuador», sostuvo Pérez, quien precisó que lo hizo cuando las FARC emprendieron su traslado desde las montañas del sur hasta las selvas del interior colombiano, para reunirlo con otro grupo de secuestrados.
El recién liberado anotó: «Usábamos botas marquilla ecuatoriana, se utilizan explosivos, municiones ecuatorianas, desodorantes y algunas drogas (medicinas) brasileñas, cremas dentales y jabones venezolanos».
El político precisó que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que lo secuestraron el 10 de junio de 2001 en el departamento de Nariño, limítrofe con Ecuador, lo mantuvieron cautivo en solitario durante dos años, siempre en la frontera con ese país.
«Estuve en las fronteras con Perú, Ecuador, Brasil, Venezuela», dijo Pérez, a quien los rebeldes pusieron en libertad el miércoles junto a Gloria Polanco de Lozada, Orlando Beltrán Cuéllar y Jorge Eduardo Gechem Turbay.
La de ellos fue la segunda entrega unilateral de rehenes hecha por las FARC, que el pasado 10 de enero liberaron a la ex legisladora Consuelo González de Perdomo y la ex aspirante a vicepresidente Clara Rojas, ex compañera de fórmula de la candidata presidencial Ingrid Betancourt, todavía cautiva.
Pérez se apartó de las afirmaciones triunfalistas de los altos mandos militares y funcionarios, y sostuvo que la salida al conflicto colombiano no es por la vía militar.
Según él, «hay mucha guerrilla, están fortalecidos en dinero, (lo que) les ha permitido logística y militarmente adquirir una serie de elementos y hombres».
Observó que una muestra de ello es el hecho de que él y los guerrilleros que lo trasladaron hasta el punto en el que fue liberado el miércoles caminaron unos 230 kilómetros.
La travesía fue por territorios en los que, se supone, están activos unos 18.000 efectivos militares que buscan a los miembros del mando central de las FARC, recordó luego.
Se trata de una ofensiva conocida como Plan Patriota, asesorada por Washington y puesta en marcha por el Gobierno del presidente Álvaro Uribe.
El ex congresista dijo que los años de cautividad le dejaron la percepción de que, en las FARC, «le reconocen (a Uribe) su inmensa capacidad de lucha para destruirlos».
EFE
