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Grupo que robó un Picasso en Brasil planeaba escapar con seis telas más

Autor intelectual del mayor robo al patrimonio artístico en la historia de Brasil reveló que las otras obras que pretendían sustraer eran «Paseo al crepúsculo», de Van Gogh, «Niña con las espigas» y otra por identificar de Renoir; «Resurrección de Cristo», de Rafael, y dos más de Picasso: «El atleta» y «Toalete».


El grupo que el pasado 20 de diciembre robó del Museo de Arte de Sao Paulo (MASP) los cuadros «El retrato de Suzanne Bloch», del español Pablo Picasso, y «O lavrador de café», del brasileño Cándido Portinari, planeaba huir con otras seis valiosas telas, señaló este viernes uno de los autores del robo.



El chef Moisés Manoel de Lima Sobrinho, hijo de un hacendado y una prestigiosa abogada de la capital Brasilia y apuntado como el autor intelectual del mayor robo al patrimonio artístico en la historia de Brasil, indicó a la edición digital del diario Folha de Sao Paulo que otra persona planeó al plagio de las obras.



Según de Lima Sobrinho, detenido en una comisaría policial, las otras obras que pretendían ser robadas eran «Paseo al crepúsculo», de Van Gogh, «Niña con las espigas» y otra por identificar de Renoir; «Resurrección de Cristo», de Rafael, y dos más de Picasso: «El atleta» y «Toalete».



De Lima Sobrinho, quien tenía un programa de culinaria en la televisión regional del estado de Goiás, reveló que recibiría cuarenta millones por su participación en el robo, cuyas obras hurtadas fueron recuperadas el 7 de enero en la ciudad paulista de Ferraz de Vasconcelos.



El cocinero y experto en arte europeo señaló que una persona pública «bastante conocida» fue quien planeó el robo y ahora tiene amenazada a su familia y a la de los otros dos capturados acusados de participar del robo, realizado con la ayuda de un gato hidráulico y una palanca, aprovechando el cambio de turno de los guardias.



Con un patrimonio artístico valuado en 1.000 millones de dólares, de los cuales 50 millones correspondían a las obras recuperadas, el MASP cuenta con el mayor acervo de arte privado de Latinoamérica y después del robo su seguridad interna y externa fue doblada.



EFE

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