Este año se han colgado carteles gigantes de los edificios que rodean la Plaza, y en uno de los extremos de la explanada hay 25 imágenes de líderes y mártires sindicales cubanos junto a los rostros de Marx, Lenin y Engels.
Cuba celebrará este jueves con sus habituales actos multitudinarios en toda la isla y con Raúl Castro por primera vez como presidente la festividad del Primero de Mayo, una de las fechas marcadas en el calendario de la revolución.
La Plaza de la Revolución, escenario tradicional de estas celebraciones en La Habana, tiene listas las banderas, carteles, equipos de audio y gradas para la actividad, a la que los organizadores han convocado a medio millón de personas.
Decenas de constructores, técnicos y personal de seguridad ultimaban detalles hoy en la Plaza, donde ya se ubicó la tarima presidencial, al pie de la estatua de José Martí.
El coro que pondrá música al desfile, y que tradicionalmente interpreta una versión de «La internacional», finalizó sus ensayos en horas de la mañana mientras los turistas paseaban curiosos por la gran explanada.
Este año se han colgado carteles gigantes de los edificios que rodean la Plaza, y en uno de los extremos de la explanada hay 25 imágenes de líderes y mártires sindicales cubanos junto a los rostros de Marx, Lenin y Engels.
El edificio de la Biblioteca Nacional está cubierto por un lienzo rojo con el lema que presidirá el Día del Trabajo en la isla: «Unidad, Firmeza y Victoria».
Además, en el Teatro Nacional se colocó un cartel que reza: Eficiencia y Productividad, un llamado a los trabajadores cubanos que reitera una de las principales líneas políticas del Gobierno de Raúl Castro, y en la que funcionarios y dirigentes del Partido Comunista de Cuba (PCC) han insistido en los últimos dos meses.
Aunque no se ha anunciado oficialmente quién encabezará el acto, es casi seguro que el general Castro lo presida, al igual que hizo el pasado año cuando todavía gobernaba de forma provisional, aunque se da por descontado que las palabras centrales correrán a cargo del secretario general de la Central de Trabajadores (CTC), Salvador Valdés.
El centro de atención en el desfile de 2007 fue la posible reaparición pública de Fidel Castro, cuya participación en los actos del Primero de Mayo era una tradición histórica, pero el convaleciente líder no asistió y los cubanos festejaron la fecha sin él por primera vez.
La televisión local recordó este miércoles fragmentos de los últimos discursos de Fidel Castro en esas celebraciones, y resaltó que el líder de la revolución siempre ha estado ahí, «con su luz, con su palabra necesaria».
Autoridades del PCC y de la CTC anunciaron que al desfile asistirán 1.230 invitados de 56 países, en representación de 129 organizaciones y movimientos sindicales.
El secretario general de la CTC, sindicato único en la isla, ha destacado «el entusiasmo» de los trabajadores por participar en el acto y «llenar cada rincón» de la Plaza Revolución.
EFE
