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Protesta contra ultraderecha acaba en batalla campal y coches quemados

Automóviles en llamas (entre ellos uno de la Policía), ventanales rotos y barricadas incendiarias fue el resultado del estallido de violencia, ante el que el fuerte contingente policial se vio durante unas horas desbordado.


Varias manifestaciones convocadas este jueves en protesta por las marchas de la ultraderecha anunciadas para el Día del Trabajo acabaron en batalla campal entre izquierdistas y Policía en la ciudad alemana de Hamburgo, donde se levantaron barricadas incendiarias con contenedores de basura y se quemaron automóviles.



Más de 10.000 personas en Hamburgo y otras tantas en Nuremberg respondieron al llamamiento de salir a la calle para plantar cara al ultraderechista Partido Nacional Democrático (NPD), que había convocado manifestaciones en ambas ciudades.



Mientras en Nuremberg la Policía logró impedir la confrontación entre 1.100 neonazis y algunos centenares de contramanifestantes violentos, Hamburgo se convirtió en campo de batalla entre los antidisturbios y los «autónomos» o radicales de izquierda que querían llegar hasta la marcha de otro millar de neonazis.



Automóviles en llamas (entre ellos uno de la Policía), ventanales rotos y barricadas incendiarias fue el resultado del estallido de violencia, ante el que el fuerte contingente policial se vio durante unas horas desbordado.



Partidos políticos -incluida la conservadora Unión Socialcristiana de Baviera (CSU), en Nuremberg- y ciudadanía habían llamado a plantar cara al NPD.



Al término de las manifestaciones pacíficas, se desbordó la situación cuando los «autónomos», encapuchados y de negro, trataron de romper el cordón policial dispuesto en Hamburgo.



Por la mañana, la Confederación de Sindicatos Alemanes (DGB) y el Partido Socialdemócrata (SPD) habían instado en su acto central a la prohibición del NPD, al que acusaron de pretender «usurpar» el protagonismo de la jornada con marchas de neonazis.



«Es intolerable que la justicia y las administraciones no puedan impedir las provocaciones nazis en nuestro Primero de Mayo», dijo el presidente de la DGB, Michael Sommer, en Maguncia (oeste del país).



La comunidad judía también había protestado por la marcha neonazi de Nuremberg, la ciudad donde Hitler celebró los grandes congresos de su partido.



La víspera del Primero de Mayo, llamada la Noche de Walpurgis, se saldó ya con detenciones y disturbios por parte de jóvenes de izquierda en Hamburgo y Berlín.



Un total de seis personas fueron detenidas en Hamburgo, mientras que en Berlín se practicó otra veintena de arrestos.



Los altercados en Hamburgo, la víspera, se produjeron después de que jóvenes de la denominada «Rote Flora» («Flora Roja») lanzaran botellas contra los antidisturbios.



Sin embargo, a última hora de la tarde de hoy hubo de nuevo escarceos en el barrio berlinés de Kreuzberg, al ser atacado el jefe de la Policía de la capital por izquierdistas durante la tradicional marcha del Día del Trabajo en ese distrito.



EFE

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