El secretario ejecutivo del Consejo de Relatores de Derechos Humanos en Cuba dijo que comprendía la negativa de Tabaré Vázquez, pues el encuentro con disidentes podría causar «inconvenientes en el desarrollo de las relaciones bilaterales con Cuba».
El Consejo de Relatores de Derechos Humanos en Cuba manifestó este miércoles su «dolor» ante la decisión del presidente uruguayo, Tabaré Vázquez, de no reunirse con políticos opositores durante el viaje que ha comenzado a la isla.
En declaraciones al diario uruguayo de internet Observa, el secretario ejecutivo de ese grupo opositor, Juan Carlos González, afirmó que comprendía la negativa de Vázquez, pues el encuentro con disidentes podría causar «inconvenientes en el desarrollo de las relaciones bilaterales con Cuba».
No obstante, subrayó que tal decisión les producía «mucho dolor», pues la reunión había sido pedida por organizaciones políticas y sociales de diversa índole para explicar a Tabaré Vázquez «la realidad que los disidentes padecen en Cuba».
Indicó que, en los últimos tres meses, 28 de sus compañeros fueron detenidos y que la violencia se incrementó considerablemente en Cuba, con denuncias por parte de grupos de derechos humanos que cifraron en 45 los muertos por mala alimentación, palizas y suicidios.
Procedente de Panamá y en una segunda etapa de una gira que también le llevará a México, Vázquez llegó anoche al aeropuerto José Martí de La Habana, donde fue recibido por el ministro cubano de Relaciones Exteriores, Felipe Pérez Roque.
En las mismas instalaciones aeroportuarias, el mandatario declaró a la prensa que para él y su Gobierno es «un profundo honor» estar en Cuba, «a cuyo pueblo tanto quieren los uruguayos».
La anterior visita de un gobernante uruguayo la hizo Julio María Sanguinetti hace nueve años, pero en abril de 2002 se abrió una brecha entre los dos países.
El entonces presidente uruguayo, Jorge Batlle, rompió las relaciones con Cuba en torno a la ahora desaparecida Comisión de Derechos Humanos de la ONU, partidaria de enviar un observador a la isla.
Tabaré Vázquez recibió una carta el 31 de mayo pasado en la que los disidentes cubanos le pedían que, durante su visita, escuchara «la voz» de los opositores y defensores de los derechos humanos en la isla.
Aunque en un principio el Gobierno uruguayo barajó la posibilidad de esa reunión, finalmente el propio Vázquez señaló que no podía correr «el riesgo» de verse con los disidentes.
EFE
