Naruhito, que llegó a Brasil el martes 17 de junio, cumplió una apretada agenda cultural con varios otros eventos y fue además homenajeado con una cena de gala organizada hoy en el palacio de los Bandeirantes, sede del gobierno del estado de Sao Paulo.
El príncipe heredero del trono de Japón, Naruhito, visitó este sábado el emblemático lugar en el puerto brasileño de Santos en el que hace 100 años llegaron a Brasil los primeros 781 inmigrantes japoneses tras un épico viaje.
Naruhito, quien cumple una visita oficial de nueve días a Brasil centrada en eventos culturales para la celebración de ese centenario, depositó una ofrenda floral en el muelle 14 del puerto donde el buque Kasato Maru atracó el 18 de junio de 1908.
Santos, en el litoral del estado de Sao Paulo, se vistió hoy de fiesta para recibir un príncipe que ha despertado la simpatía de los brasileños por su sencillez y frecuentes quiebras de protocolos durante los actos oficiales.
El heredero del Imperio del Sol Naciente recibió un simbólico ramo de lirios blancos y orquídeas amarillas, entregado por un descendiente de japoneses que trabaja en el grupo Vorotantim, uno de los mayores conglomerados industriales y financieros de Brasil al que pertenece hoy el muelle histórico.
Luego depositó las flores e hizo una reverencia en el monumento a los pioneros que llegaron en busca de un nuevo destino en tierras brasileñas, un país entonces totalmente desconocido y ajeno a su cultura.
Hoy en Brasil vive la mayor colonia japonesa en el exterior, compuesta por 1,5 millones de descendientes nipones, según las propias asociaciones de inmigrantes.
En la costa de Santos, Naruhito también inauguró una escultura de la artista plástica nipona-brasileña Tomie Ohtake, de 94 años, quien ha vivido 72 años en Brasil.
En una intensa jornada de encuentros con la colonia y la herencia japonesa en el estado de Sao Paulo, Naruhito también fue el invitado de honor a la ceremonia oficial en el «Sambódromo» de la ciudad de Sao Paulo, donde se esperaban unas 25.000 personas.
Allí, un espectáculo con carrozas, músicos y bailarines contó la historia de esta inmigración y su herencia al mejor estilo de los desfiles de carnaval tan típicamente brasileños.
Naruhito, que llegó a Brasil el martes 17 de junio, cumplió una apretada agenda cultural con varios otros eventos y fue además homenajeado con una cena de gala organizada hoy en el palacio de los Bandeirantes, sede del gobierno del estado de Sao Paulo.
EFE
