Publicidad

Empresarios británicos dicen que primer ministro es un líder incapaz

El partido negocia por otro lado con los empresarios que le han prestado millones de libras la posibilidad de extender en hasta una década el plazo de devolución de los créditos.


Varios empresarios británicos que han hecho en el pasado importantes donaciones al Partido Laborista pusieron en duda la capacidad de liderazgo del primer ministro, Gordon Brown, y reclaman un nuevo cambio en la cúspide de ese partido.



En declaraciones a la emisora BBC, el empresario Gerry Robinson, afirmó este domingo que los laboristas «tienen actualmente graves problemas» y agregó que Brown «muestra todos los signos de no ser capaz como líder».



«Este tipo de crisis no sucede por azar. (…) La política es, como todo, una cuestión de liderazgo. Y no creo sinceramente que Gordon (Brown) tenga esa capacidad», agregó.



Robinson no es, sin embargo, sólo el único que piensa de ese modo, y así el dominical «The Sunday Times» informa hoy de que varios hombres de negocios que apoyaron al Nuevo Laborismo bajo Tony Blair abogan por cambiar al líder.



Así, el multimillonario Maurice Hatter, que ha donado el equivalente de más de 221.000 euros al Nuevo Laborismo desde 2001, considera que Brown «carece de carisma».



«Fue un buen número dos (como ministro de Economía), pero no es un número uno. No creo que sea un (buen) primer ministro», critica Hatter, quien anunció que no dará más dinero al partido mientras Brown siga en el número 10 de Downing Street.



El también empresario y escritor Christopher Ondaatje, que ha donado más de dos millones de euros al Nuevo Laborismo, ha criticado a Brown por rescatar el banco Northern Rock con dinero público.



Gerry Robinson, también donante de los laboristas y ex presidente de Granada TV y de la empresa Allied Domecq, acusa a Brown de no saber delegar y dice que así no se puede dirigir una familia y mucho menos un país.



Según «The Times», las donaciones de los multimillonarios hombres de negocios, que llegaban regularmente en los tiempos de Blair, prácticamente se han agotado.



Lord Levy, principal recaudador de fondos del partido bajo el gobierno de Tony Blair, dijo también esta semana que es hora de cambiar de líder.



Las noticias sobre la creciente desafección de los empresarios que apoyaron con entusiasmo a los laboristas bajo el anterior primer ministro, Tony Blair, son un nuevo golpe para Gordon Brown y una mala noticia para el conjunto del partido.



Los laboristas deben presentar esta semana sus cuentas públicas, y si el partido logra evitar la bancarrota es, según «The Sunday Times», gracias a una garantía por escrito de que al menos un poderoso sindicato, Unite, seguirá con su financiación.



El partido negocia por otro lado con los empresarios que le han prestado millones de libras la posibilidad de extender en hasta una década el plazo de devolución de los créditos.



EFE

Publicidad

Tendencias