Tras los ataques el país hebreo clausuró de nuevo los pasos con Gaza que había reabierto en virtud del acuerdo que entró en vigor el pasado día 19 y que tiene una duración en principio de seis meses.
Dos cohetes Kasam disparados desde Gaza cayeron este lunes en Israel, en el undécimo día de tregua en la franja y 24 horas después de la reapertura de varios pasos fronterizos entre ambos territorios, informaron fuentes militares israelíes.
Los cohetes cayeron en la zona de Shaar Negev, sin causar daños personales ni materiales, agregaron.
Se trata de las primeras violaciones palestinas del alto el fuego desde que Israel reabriese ayer, domingo, varios pasos fronterizos con Gaza, que previamente había cerrado, precisamente en respuesta al lanzamiento de cohetes contra su suelo.
Aunque la arteria vital de la maltrecha economía de la franja, el paso comercial de Karni, y el de Kerem Shalom permanecen cerrados, mañana, y tras un año de inactividad, volverá a funcionar durante tres días la terminal de Rafah, que conecta Gaza y Egipto, según fuentes oficiales palestinas.
Israel condiciona hasta ahora la reapertura de Rafah a la liberación de Guilad Shalit, el soldado israelí capturado hace dos años por tres milicias palestinas, y ningún portavoz ha confirmado la información que el paso vaya a ser abierto.
Desde ayer entran en Gaza unos ochenta camiones diarios con mercancías, muy por debajo de las cantidades de dos años atrás, pero una mejora respecto al férreo bloqueo impuesto por Israel a la franja desde que, en junio de 2007, Hamás se hiciera con su control por la fuerza.
Al amparo del cese de hostilidades, que no rige en Cisjordania, Israel había suavizado este cerco hace una semana al abrir pasos fronterizos que llevaban meses inactivos.
Sin embargo, primero la Yihad Islámica -en respuesta a la muerte de uno de sus líderes por el Ejército israelí en Cisjordania- y luego las Brigadas de los Mártires de Al Aqsa violaron la tregua al lanzar cohetes Al Kasam y proyectiles de mortero contra las localidades vecinas israelíes, sin causar víctimas ni daños materiales.
Tras esos ataques, Israel clausuró de nuevo los pasos fronterizos con Gaza que había reabierto en virtud del acuerdo que entró en vigor el pasado día 19 y que tiene una duración en principio de seis meses.
Según ese pacto, alcanzado con la mediación egipcia, las milicias palestinas tienen que dejar de lanzar cohetes y proyectiles de mortero contra Israel, que debe, por su parte, suspender sus operaciones militares en Gaza y levantar progresivamente el bloqueo a ese territorio.
Israel también ha incumplido el cese de las hostilidades, principalmente con disparos contra agricultores palestinos -que se dirigían a cultivar sus tierras cerca de la valla entre Gaza y el Estado judío- y contra pescadores, pues la Marina israelí controla el espacio marítimo de Gaza.
Hamás, el movimiento que ha dirigido el proceso por parte palestina, ha advertido de que detendrá y desarmará a los milicianos culpables de nuevas violaciones del alto el fuego, aún si son de los suyos.
La Yihad Islámica, en cambio, insiste en que «se guarda el derecho de vengar todos los crímenes israelíes independientemente de donde se produzcan».
En las últimas 48 horas, dos adolescentes palestinos han muerto en operaciones militares israelíes en Cisjordania.
EFE
