A un día de que se inauguren los Juegos Olímpicos de Beijing la defensora de los derechos humanos sostuvo que a las autoridades chinas «hay que recordarles los compromisos que adquirieron y deben rendir cuentas de ello».
Mary Castillo, ex Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU (1997-2002), afirmó en México que los Juegos Olímpicos son un marco válido para hacer protestas públicas relacionadas con la falta de libertades políticas en China y asuntos como la cuestión del Tíbet.
«No he estado de acuerdo con un boicot, ni de la ceremonia de apertura ni de los Juegos Olímpicos, pero creo que es muy apropiado llamar la atención sobre algunos de los problemas centrales de derechos humanos», dijo Robinson.
La también ex presidenta de Irlanda y actual presidenta honorífica de la ONG internacional Oxfam, que interviene hoy en la XVII Conferencia Internacional sobre Sida, dijo que entre los asuntos a reclamar está el caso del «Tíbet pero también las libertades políticas en general» de China.
«Este país cuando estaba compitiendo por los Juegos Olímpicos hizo sustanciales promesas sobre libertad de información, libre acceso de periodistas, y ahora nos estamos dando cuenta de que esos aspectos están siendo muy restringidos. Hay que atender esto», recordó Robinson.
A un día de que se inauguren los Juegos Olímpicos de Beijing la defensora de los derechos humanos sostuvo que a las autoridades chinas «hay que recordarles los compromisos que adquirieron y deben rendir cuentas de ello».
Esta mañana cuatro activistas que desplegaron ayer una pancarta en favor de la independencia del Tíbet, burlando la férrea seguridad de la organización de los JJOO, fueron expulsados por las autoridades chinas y enviados de regreso a sus países, el Reino Unido y EEUU.
EFE
