Para el próximo 28 de septiembre, los más de nueve millones de ecuatorianos facultados para votar están convocados a las urnas para aprobar o rechazar el proyecto de nueva Constitución.
El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, advirtió este sábado de una campaña violenta de la oposición de cara al referendo sobre el proyecto de nueva Constitución que impulsa el oficialismo.
«No caigamos en estas provocaciones que van a seguir existiendo, van a seguir creando, porque esta gente (la oposición de derecha) es así, violenta», remarcó el jefe del Estado en su habitual programa radial sabatino.
«Muy atentos compañeros, que nuestra respuesta sea la paz, la alegría, la unidad y ese positivismo y ese ‘Sí’ por esa patria nueva», arengó Correa, que volvió a pedir a la población que, en el referendo del próximo 28 de septiembre, apruebe el proyecto Constitucional que promueve.
«No se dejen provocar», solicitó Correa a sus simpatizantes, aunque remarcó que, «si tienen que defenderse, en un momento dado, habrá que hacerlo».
Parafraseando al líder espiritual indio Mahatma Gandhi, Correa dijo que, «si tiene que correr sangre, que sea la nuestra».
Además, el mandatario destacó la multitudinaria concentración que el movimiento oficialista Alianza País hizo el pasado sábado en Quito, donde reunió a más de 100.000 personas de todo el país.
«Es imposible perder con tanta alegría y con tanta convicción», sostuvo Correa, que ha vencido a la oposición de derecha en las tres últimas elecciones.
Asimismo, señaló que el proyecto de Carta Magna, que será votado en el referendo y que fue elaborado entre noviembre y julio pasados por una Asamblea Constituyente dominada por el oficialismo, pretende cambiar el pasado y fortalecer la democracia en el país.
El presidente criticó la publicidad política que ha presentado la oposición, que le acusa, según dijo, hasta de los efectos que causó la temporada de lluvias entre enero y abril pasados.
«¿Es que se les puede creer a estos mentirosos?», se preguntó Correa, que acusó a sus detractores de tener una «pequeñez de alma», porque no han reconocido los grandes esfuerzos de su Gobierno para atender a los miles de damnificados que causaron las lluvias, sobre todo en la zona costera del país.
Para el próximo 28 de septiembre, los más de nueve millones de ecuatorianos facultados para votar están convocados a las urnas para aprobar o rechazar el proyecto de nueva Constitución.
EFE
