Las embajadas de Corea del Sur y Singapur pidieron a sus nacionales que eviten las visitas innecesarias; Australia y Taiwán les instaron a extremar la cautela, y China avisó a los suyos de que revisen sus rutas y estén atentos al desarrollo de los acontecimientos.
La industria del turismo de Tailandia ha sufrido hoy un aluvión de cancelaciones, después de que varios gobiernos asiáticos recomendaran a sus ciudadanos no viajar al país tras la declaración del estado de excepción.
Por su parte, el embajador de España en Bangkok, emplazó a los ciudadanos españoles que se encuentren en el país «precaución» y que se pongan en contacto con la sede diplomática.
Los manifestantes antigubernamentales bloquean hoy los accesos a los aeropuertos de Krabi y Hat Yai, dos de los mayores destinos turísticos del país.
Los aeródromos fueron cerrados el pasado viernes por la presión de los activistas y reabiertos un día después.
El primer ministro de Tailandia, Samak Sundaravej, declaró a primera hora de la mañana de hoy el estado de excepción, que permite al Ejército emplear la fuerza, bloquear cualquier carretera, evacuar edificios y censurar a los medios de comunicación.
Además, la medida también prohíbe las reuniones públicas de más de cinco personas y autoriza a las fuerzas de seguridad a detener sin cargos a sospechosos de rebelión durante un período máximo de 30 días.
Sundaravej dijo que los militares podrán entrar en cualquier lugar para desalojar a quienes desobedezcan el estado de excepción, indicó en alusión a la Alianza del Pueblo para la Democracia, cuyos seguidores ocupan desde hace una semana la sede del Gobierno en Bangkok.
Por su parte, el líder de los manifestantes, el ex general y antiguo gobernador de Bangkok, Chamlong Srimuang, anunció que seguirá desafiando las órdenes del primer ministro hasta que éste dimita.
«No hay suficientes prisiones en el país para meternos a todos», dijo Chamlong sobre la tarima del escenario montado por los activistas.
Chamlong ya lideró en 1992 las multitudinarias protestas contra el entonces régimen militar, que en aquella ocasión acabaron con la muerte de medio centenar de manifestantes por disparos de los soldados.
EFE
