Venezuela pidió tiempo para que los países pudieran presentar una candidatura alternativa a la de Insulza.
La reelección de José Miguel Insulza como secretario general de la OEA podría resultar no tan fácil como parecía, dado que empieza a haber movimientos dentro del organismo y fuera de él para, al menos, dificultarla.
Los primeros signos de que algo se está «cociendo» en el seno de la OEA y fuera de ella se comenzaron a notar ayer.
La convocatoria para celebrar el 24 de marzo las elecciones del secretario general y del secretario general adjunto, cargos que ocupan en la actualidad Insulza y el surinamés Albert Ramdin, respectivamente, iba a ser sometida a votación en el Consejo Permanente, pero el debate fue postergado una semana a petición de Venezuela, según dijeron fuentes diplomáticas.
Las mismas fuentes, que pidieron el anonimato, señalaron que Venezuela pidió más tiempo para que los países pudieran presentar una candidatura alternativa a la de Insulza.
De hecho, la Alianza Bolivariana para las Américas (ALBA) «está considerando presentar un candidato» y sus miembros opinan que todas las campañas deben tener la misma oportunidad y empezar al mismo tiempo, señalaron las fuentes, conocedoras de las intenciones de esta agrupación regional, formada, entre otros países, por Venezuela, Nicaragua, Bolivia, Cuba y Ecuador.
La posibilidad de presentar una candidatura que compita con la de Insulza fue abordada en la reunión que mantuvo la ALBA el lunes en Caracas para abordar la tragedia en Haití tras el devastador terremoto del pasado día 12.
Otras fuentes diplomáticas destacaron que el tiempo para que la ALBA formalice su propuesta es escaso, y también cuestionaron el apoyo que podría recibir la alianza en la OEA, dado que se considera muy consolidada la candidatura de Insulza.
En cualquier caso, de concretarse una candidatura de la ALBA, podría dificultar al ex ministro chileno su reelección o, cuanto menos, crear «ruido» y entorpecer sus aspiraciones.
Cualquier candidatura que se presente es legítima, pero en ciertos círculos de la OEA se duda de las verdaderas intenciones de la ALBA y se quiere ver si, y a qué nivel, presenta su propuesta para poder ver más claramente sus pretensiones.
Pero un posible rival de la ALBA no es el único obstáculo que podría afrontar Insulza, que ha recibido duras críticas por parte de los republicanos en el Congreso de EE.UU.
Un informe elaborado por la oficina del senador Richard Lugar, el republicano de más alto rango en el Comité de Relaciones Exteriores de la cámara alta de EE.UU., y que se dio a conocer hoy, critica el liderazgo de Insulza al frente de la OEA y afirma que los países miembros no deben dar por garantizada su reelección.
El documento asegura además que la OEA ha demostrado una «pasividad relativa» en cuanto a la erosión gradual de la democracia, como ha sido el caso en la persecución de los medios en Venezuela o el reciente «fraude electoral» en Nicaragua.
Curiosamente, la suspensión temporal de la programación de varios canales privados por cable y satélite en Venezuela y la condena de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ante esta decisión ha suscitado fuertes críticas del embajador venezolano ante la OEA, Roy Chaderton.
Las fuentes diplomáticas consultadas desvincularon, no obstante, el aplazamiento del debate sobre la convocatoria de las elecciones en la OEA a petición de Venezuela de lo ocurrido en los últimos días y de la molestia que ha causado en Caracas la actuación de la CIDH.
Insulza se ofreció a mediar entre las partes.
Pese a todo, según las fuentes consultadas, tanto Insulza como Ramdin tienen los suficientes apoyos y votos para ser reelegidos el próximo 24 de marzo, fecha a la cual la ALBA no se opone.
De hecho, el canciller, Mariano Fernández, indicó recientemente que Insulza tiene ya los votos suficientes para ser reelegido al frente del organismo.
«La candidatura está presentada por el Gobierno de Chile. Tiene ya un respaldo mayoritario. Tenemos una cantidad de votos suficientes como para que sea elegido», dijo.
También el embajador argentino ante el organismo, Rodolfo Hugo Gil, dijo en un reciente Consejo Permanente que, según las «charlas de pasillo» en la OEA, la candidatura de Insulza está «muy consolidada», y también Ramdin contaría con el apoyo necesario.
Por eso, la reelección de Insulza parece bien encaminada, pero aún hay países que no quieren decantarse por su candidatura.
Estados Unidos, por ejemplo, todavía no ha decidido si apoyará su reelección, según dijo recientemente el secretario de Estado adjunto para América Latina, Arturo Valenzuela.
