El presidente del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán lamentó que EE.UU. haya «ignorado» esta realidad pese a disponer de informes.
El Consejo Nacional de la Resistencia de Irán, principal movimiento de oposición al régimen islámico de Teherán, denunció hoy que la información confidencial desvelada recientemente por WikiLeaks sobre la guerra de Irak es «sólo una parte de la realidad».
En una rueda de prensa celebrada en Bruselas, el presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la organización iraní, Mohammad Mohaddessin, pidió a la comunidad internacional que ponga fin a la «intromisión» que, a su juicio, lleva a cabo el régimen iraní en Irak con el beneplácito de las autoridades de Bagdad.
Mohadessin reclamó que se admita la influencia que tiene Irán en los movimientos subversivos que operan en el país vecino, con el objetivo de desestabilizar e impedir que los grupos partidarios de la democracia consigan instaurar un gobierno estable en Irak.
Ha lamentado que EEUU haya «ignorado» esta realidad pese a disponer de informes como los revelados recientemente por WikiLeaks sobre la guerra de Irak y otros documentos aportados por el grupo opositor, como un listado con los nombres de supuestos 3.200 «mercenarios» iraníes que operan en Irak.
«Estados Unidos tiene pruebas para no creer las excusas del Gobierno iraquí», aseguró Mohadessin, quien mostró varios documentos durante la rueda de prensa que, aseguró, demuestran los vínculos entre el primer ministro iraquí en funciones, Nuri al Maliki, con Irán.
Según el opositor iraní, Irak ha comprado armas al régimen iraní, mientras que el régimen liderado por Mahmud Ahmadineyad ha respaldado los ataques en suelo iraquí llevados a cabo por grupos vinculados a Al-Qaeda e incluso operaciones de la Guardia Revolucionaria iraní y el grupo chií libanés Hizbulá.
Mohadessin instó a la comunidad internacional a tomar medidas para hacer frente a esta situación, entre ellas la creación de un tribunal especial para juzgar «los crímenes» de Al Maliki.
Por otra parte, reclamó que EEUU retire de su lista de organizaciones terroristas a los opositores de la Organización de los Muyahidines del Pueblo de Irán (OMPI), ya que aseguró que es un sinsentido que no persigan a «quienes quieren asesinar estadounidenses, mientras se llama terroristas al movimiento más serio de la oposición» iraní.
Además, Mohadessin pidió a las autoridades estadounidenses que «rectifiquen» y retomen el control de la seguridad del campo de refugiados de Ashraf (noreste de Irak) que cedieron al Ejército iraquí en enero de 2009.
Expresó su temor de que se repita un ataque como el que perpetraron las fueras iraquíes en el campamento -donde residen unos 3.400 opositores iraníes- el 28 de julio de 2009, en el que murieron once personas, 500 resultaron heridas y 36 fueron detenidas.
