«Aunque estábamos vendadas sabíamos que no eran las mismas respiraciones, los mismos olores, los mismos insultos», aseguró Silvia Ontiveros al recordar lo que debió vivir en 1976 cuando fue llevada al denominado «Centro de Operaciones D2».
Una sobreviviente de la última dictadura argentina reveló este martes en un juicio que durante su detención ilegal a manos del régimen militar fue víctima de una veintena de violaciones «con distintos hombres, supuestamente policías, y varias veces al día».
El crudo testimonio ante el Tribunal 1 de Mendoza fue hecho por Silvia Ontiveros al declarar en el segundo juicio por delitos de represión cometidos por la dictadura (1976-1983) que se lleva a cabo en esta provincia del oeste del país, informaron fuentes judiciales.
Tras recordar que fue sometida a «tremendas golpizas y sesiones de picana eléctrica», la mujer habló de las «salvajes» violaciones que sufrían las detenidas en un cárcel ilegal conocida como «Centro de Operaciones D2».
«Aunque estábamos vendadas sabíamos que no eran las mismas respiraciones, los mismos olores, los mismos insultos», aseguró Ontiveros.
La mujer fue detenida el 9 de febrero de 1976, cuando tenía 29 años, y trasladada al «D2», donde, según confesó hoy, vivió «un infierno».
Sentados en el banquillo de los acusados del tribunal mendocino están ocho ex militares acusados de al menos 19 casos de «privación ilegítima de la libertad, homicidio agravado, torturas, desaparición de personas, allanamientos ilegales y asociación ilícita».
Unas 30.000 personas desaparecieron en Argentina en la última dictadura, según estiman los organismos de derechos humanos.
