Las autoridades argentinas acusan a la empresa de falta de inversiones y caída en la producción, pese a que YPF sostiene que duplicó sus inversiones en el país trasandino el año pasado.
La petrolera argentina YPF, controlada por la española Repsol, prepara los detalles de la reunión de directorio convocada para mañana, miércoles, que será clave en el conflicto que mantiene la compañía con el gobierno de Cristina Fernández.
La reunión tendrá como punto del orden del día la convocatoria de la junta de accionistas a la que el directorio de YPF elevará una propuesta sobre el destino de los resultados no asignados del ejercicio 2011.
Precisamente, en la última reunión de directorio, el pasado 8 de marzo, este punto quedó pendiente de resolución, después de que el representante del Estado en el consejo, Roberto Baratta, se opusiera a la aprobación de las cuentas de 2011 y reclamara la creación de una reserva de inversiones para exploración y explotación de hidrocarburos.
La reserva, según la propuesta de Baratta, sería creada con los resultados no asignados de los ejercicios contables de 2010 y 2011.
Las autoridades argentinas acusan a la empresa de falta de inversiones y caída en la producción, pese a que YPF sostiene que duplicó sus inversiones en Argentina el pasado año en exploración y refino.
«El Gobierno nacional simplemente lo que está buscando es que haya producción. Nadie está hablando de cosas raras», dijo el jefe de Gabinete argentino, Juan Manuel Abal Medina, en declaraciones a radio Continental.
Consultado sobre si el gobierno planea nacionalizar o cambiar las condiciones de operación de YPF, el ministro contestó: «No, básicamente estamos yendo hacia una idea de que tienen que cumplir lo que están comprometidos a hacer y lo que tienen que hacer como empresa, que es producir, nada del otro mundo ni excesivamente extraño».
Consideró que es «lógico» que el gobierno se preocupe por este asunto cuando se verifica que Argentina tiene que importar energía cuando el país «tiene reservas y, a la vez, viendo a esta empresa importante que permanentemente manda ganancias al exterior».
Desde que empezó la escalada gubernamental contra la petrolera, el pasado diciembre, el valor de la compañía, que cotiza en bolsa, ha caído alrededor de un 20 por ciento, y la empresa ha perdido varias licencias de explotación en las provincias patagónicas de Chutub y Santa Cruz (sur) y en Neuquén (oeste), que en conjunto suponen cerca de un 4 por ciento de su producción total de crudo y gas en Argentina.
Además, expertos del sector no descartan que YPF pueda perder nuevas licencias en la provincia de Mendoza, mientras que el gobierno de Salta (norte) anunció hoy que ha pedido a varias operadoras que presenten, antes del próximo día 31, un plan de inversiones 2012-2013 para la provincia.
YPF, en la que Repsol tiene el 57,43 % de las acciones, es el mayor productor de hidrocarburos de Argentina, el mayor contribuyente fiscal y uno de los principales empleadores, con una plantilla de 13.500 trabajadores.
Según datos de la compañía, en 2011 realizó inversiones récord, principalmente en exploración y producción, por unos 3.000 millones de dólares, 50 % más que en el 2010.
YPF tiene el 32 % de la explotación de petróleo y el 23 % de la de gas de Argentina, según datos del Instituto Argentino del Petróleo y del Gas.
