El hecho ocurrió esta madrugada luego de que militares detuvieran a un grupo que intentaba llegar a Apatzingán, enclave de los Caballeros Templarios. El líder de los paramilitares dijo que “no podemos dejar desamparados a estos pueblos que luchan por su libertad”.
Luego de que el gobierno mexicano decidiera desarmar las recién formadas autodefensas, quienes intentan luchar contra los Caballeros Templarios en Michoacán, la tensión en esta localidad ha ido en aumento. Hasta el momento las informaciones hablan de entre 7 y 12 muertos, después que en la madrugada de este martes el Ejército detuviera a un grupo que intentaba llegar a Apatzingán, enclave del grupo narco.
El líder de las autodefensas, José Mireles, dijo que quieren que el Estado restablezca el Estado de derecho en la región de Michoacán, una de las zonas de México que ha sido víctima de luchas entre el Ejército y el narcotráfico.
“Nosotros lo único que queremos es que se restablezca el Estado de derecho en Michoacán, no que se pierdan los Poderes porque eso nos traería una revolución civil que no íbamos a parar, pero sí que el gobierno asumiera la responsabilidad que le corresponde de brindarnos la responsabilidad y la protección a todos y cada una de las personas productivas que tiene el Estado”, dijo Mireles a través de un video publicado anoche.
Aunque en un comienzo Mireles aceptó dejar las armas, en la madrugada de hoy en un nuevo video difundido en Internet, el líder paramilitar aclaró que él no autorizaba el desarme de ningún grupo armado, sino que es decisión del consejo general.
Una hora antes de la difusión del video, cerca de las 22 horas, en el retén de Cuatro Caminos, integrantes de la Sedena, hicieron varios disparos y dieron muerte a un civil; desarmaron a los Grupos de Autodefensa y Policías Comunitarios que ahí se resguardaban, luego de tirarlos al suelo y encañonarlos, según informa la Revista Proceso.
Mirales aseguró que, si hay guerra civil, es exclusiva responsabilidad del gobierno de Michoacán. Además aseguró que se defenderán con palos, machetes y piedras. “No podemos dejar desamparados a estos pueblos que luchan por su libertad”.
En el transcurso del día llegaron a Michoacán otros miles de policías y soldados que retomaron las labores de seguridad de la entidad a petición del gobernador Fausto Vallejo.
Igualmente llegaron una decena de helicópteros, en los cuales se desplazan los policías federales y ministeriales por toda la región de Tierra Caliente.
