El diario El Universal obtuvo documentos que confirmarían un vínculo de cooperación entre Joaquín “El Chapo” Guzmán y la agencia estadounidense. Por su parte, la DEA no quiso comentar estos reportes.
Durante un año, el diario El Universal, de México, investigó y obtuvo documentos oficiales de los gobiernos de Estados Unidos y México que revelaban vínculos y reuniones entre agentes de la DEA y los carteles de la droga mexicanos, específicamente el de Sinaloa, los que hicieron un pacto secreto de cooperación mutua.
Según los documentos obtenidos por el medio mexicano, Estados Unidos estaba en conocimiento y autorizó estas reuniones, como las negociaciones entre la DEA y el cartel de Sinaloa, con el fin de que estos últimos les entregaran información para detener a narcotraficantes rivales como decomiso de cargamentos, bajo el acuerdo de que la agencia estadounidense los dejara traficar cocaína sin problemas.
Estas negociaciones habrían ocurrido en los gobiernos de Vicente Fox y Felipe Calderón, en donde comenzó la escalada de violencia entre los distintos carteles, la policía federal y el Ejército.
Davi Gaddis, en ese momento director regional de la DEA en el Distrito Federal, aseguró a El Universal que él autorizó a sus agentes a reunirse con narcotraficantes para llegar a acuerdos que beneficiaran a ambas partes.
Respecto a esto, Rusty Payne, vocero de la DEA, señaló que la agencia norteamericana “no hará comentarios sobre estos reportes en curso. El señor Gaddis ya no trabaja con nosotros”
Estas alianzas entre Estados Unidos no son algo nuevo. Es sabido el acuerdo que hicieron el gobierno colombiano y la DEA con el Cartel de Cali para dar caza a Pablo Escobar, jefe del Cartel de Medellin, quien aterrorizó a Colombia en la década de los ochenta y principios de los noventa.
Además, hace unos meses la revista Proceso reveló declaraciones de ex agentes de la DEA que aseguraban que el secuestro y posterior asesinato del agente encubierto Enrique “Kike” Camarena no fue perpetrado por carteles mexicanos, sino que por la propia CIA, debido a que el ex agente había descubierto que Estados Unidos financiaba a los Contras de Nicaragua con dinero proveniente del narcotráfico.
