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Iglesia venezolana acusa a organismos de seguridad de «extralimitarse» con manifestantes y estudiantes piden a Cuba dejar de «entrometerse»

Iglesia venezolana acusa a organismos de seguridad de «extralimitarse» con manifestantes y estudiantes piden a Cuba dejar de «entrometerse»

La excesiva represión con que el gobierno de Nicolás Maduro ha decidido controlar las movilizaciones parece ser el punto que comienza a desatar las primeras fisuras entre quienes apoyan al sucesor de Hugo Chávez. Por su parte, la Iglesia Católica pidió además a la «Comisión de la Verdad» investigar los hechos de violencia de los últimos días que cobraron más de una decena de muertos. Mientras, la oposición marchó hasta la embajada de Cuba: «Le recordamos a la dictadura de los hermanos Castro que Venezuela es un país soberano», sostuvieron.


El tema de un excesivo uso de la fuerza por parte de los organismos de seguridad en Venezuela se está convirtiendo en  la principal fuente de críticas hacia el gobierno en los últimos días y amenaza incluso con transformarse en una eventual causal de diferencias al interior del oficialismo. Este martes, los obispos de la Conferencia Episcopal de Venezuela (CEV) rechazaron el empleo de la fuerza por parte de los organismos de seguridad del Estado que, dicen, “se han extralimitado” al reprimir varias de las manifestaciones de los últimos días.

“Rechazamos rotundamente el empleo de la fuerza ejercida en algunas manifestaciones por parte de organismos de seguridad del Estado, que se han extralimitado y han producido consecuencias lamentables e irreparables”, señaló la CEV en un comunicado en referencia a los sucesos que han dejado al menos 13 muertos.

Asimismo, el documento indicó que la Fiscalía “debe investigar estos casos y poner en manos de la justicia a miembros de estos organismos que hayan abusado de su autoridad” y recuerda que las autoridades policiales y militares “están obligadas a respetar los Derechos Humanos, ante todo el derecho a la vida”.

La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, dijo el lunes que “se tiene mucha claridad de cómo ocurrieron los hechos” en los que se produjeron las tres muertes registradas en Caracas al final de una concentración opositora el pasado día 12 y que hay tres agentes del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) detenidos por ello.

Los obispos indicaron, además, que oran “por los que han fallecido y por quienes han resultado heridos”, que, según cifras oficiales, son unos 150. Asimismo, pidieron que se busque “la verdad” de los hechos y sucesos de los últimos días “con el concurso de todos”.

La CEV señaló, además, que la “Comisión de la Verdad” propuesta recientemente por el presidente, Nicolás Maduro, para investigar los hechos violentos de los últimos días “no es para favorecer a un sector en detrimento del otro, sino para buscar la verdad de acontecimientos dolorosos que han enlutado a familias venezolanas”. ”Es necesario que Venezuela conozca a quienes han delinquido y paguen su condena, sea quien sea”, enfatizaron los obispos.

Los jerarcas de la Iglesia Católica también apuntaron que el pueblo tiene derecho a la protesta acorde a lo establecido en la Constitución, pero que no se puede aceptar que se torne violenta “como desafortunadamente se ha visto en algunos casos”, se convierta en vandalismo o propicie la ocasión para actos delictivos por parte de grupos ajenos a la protesta.

“Comprobamos la indefensión de la ciudadanía ante la irrupción de grupos armados no policiales ni militares que han arremetido contra la población”, expresó el escrito de la CEV, que también reclama que “grupos de esta naturaleza están al margen de la ley, no poseen autoridad alguna y atentan contra las bases de la convivencia”. En este punto, los obispos pidieron “que se actúe y se impida que sigan realizando sus fechorías, y se investigue seriamente su proceder, sea de la tendencia política que sea”.

El documento de los prelados resaltó, asimismo, que se debe insistir en el diálogo entre todos los factores que componen la sociedad venezolana, en que haya respeto y reconocimiento de los que piensan diferente. ”Pedir diálogo y paz con un verbo encendido o incendiando la calle, no produce el efecto esperado”, indicaron los obispos.

Las primeras grietas en el oficialismo

En los últimos días, han comenzado a aparecer señales de preocupación y nerviosismo entre algunos de los personajes del chavismo que han expresado su desacuerdo con la brutal represión emprendida contra los manifestantes.

Una de estas señales se produjo el lunes en la mañana cuando el gobernador chavista del estado Táchira, José Gregorio Vielma Mora (foto), sostuvo que la represión ha sido excesiva. La autoridad señaló que la militarización del estado que él gobierna, la cual fue ordenada por Nicolás Maduro, fue “un grave error” y “un exceso inaceptable”.

Cabe señalar que Vielma Mora es un chavista de larga trayectoria que acompañó al proyecto político del fallecido Hugo Chávez desde sus inicios en los años ochenta. “Estoy en contra, me molesté mucho, fue innecesario haber pasado unos aviones militares por encima de San Cristóbal”, agregó.

En tanto, el vicealmirante Rafael Huizi Clavier, un oficial retirado que preside al Frente Institucional Militar, se mostró convencido en que gran parte de los miembros de las Fuerzas Armadas difieren de cómo el gobierno ha dictado reprimir a las hordas de manifestantes.  ”El descontento existe y con la represión brutal que fue emprendida, y con la muerte de este número de manifestantes, yo no tengo dudas de que en este momento las fisuras están presentes. Lo que no podemos decir es cuán profunda es y a cuántos sectores abarca”, comentó.

Estudiantes piden a Cuba frenar “intromisión”

En el intertanto, decenas de estudiantes y simpatizantes opositores marcharon este martes hasta la embajada cubana en Venezuela para entregar un comunicado en el que exigen el fin de la “intromisión”, que, según dicen, hace el Gobierno cubano en cuestiones internas del país.  ”No permitiremos más intromisión (…) que sigan controlando nuestros medios de comunicación y determinen qué podemos ver y cuándo, no permitiremos que determinen nuestras operaciones militares ni adoctrinen a nuestros hijos”, dijo la líder estudiantil Gaby Arellano al leer el “Comunicado a la dictadura de Cuba”.

“Le recordamos a la dictadura de los hermanos Castro que Venezuela es un país soberano, que no acepta injerencia de ningún tipo y ningún país”, continuó Arellano, dirigente del Frente Universitario de Voluntad Popular, el partido de Leopoldo López.

Antes de llegar a la sede diplomática los opositores realizaron una marcha desde la plaza Alfredo Sadel, punto de reunión y de inicio de muchas de las protestas estudiantiles de estos días, para caminar gritando consignas y acompañados de algunas pancartas y el apoyo esporádico desde algunos vehículos.

En las cercanías de la embajada cubana, fuertemente resguardada por efectivos de la Guardia Nacional (GNB-policía militarizada) y de la Policía Nacional (PNB), entregaron la carta a un oficial de la Policía que resguarda la sede diplomática al serles impedido el acceso a las inmediaciones de la legación.

Tras unos minutos el representante de la PNB regresó con el comunicado firmado y fechado por personal de la Embajada cubana.

“Fuerza”, “SOS”, “No a la injerencia cubana en venezuela” y “Libertad para Venezuela y para Cuba” fueron algunas de las pancartas de apoyo que se pudieron ver entre los presentes en la entrega del comunicado.

Cuba y Venezuela mantienen una estrecha alianza política y económica desde el año 2000, cuando los entonces presidentes de ambos países, Fidel Castro y el ya fallecido Hugo Chávez, firmaron un acuerdo marco de cooperación que abarca acuerdos en el ámbito energético, sanitario y deportivo, entre otros. La isla antillana mantiene alrededor de 45.000 técnicos que van desde médicos en el sector de la salud a entrenadores deportivos que Venezuela retribuye en forma de alrededor de 100.000 barriles de petróleo diarios. Sectores de la oposición venezolana mantienen y aseguran que esa cooperación llega a la presencia de oficiales cubanos en los cuarteles deVenezuela.

Estados Unidos pone presión

Estados Unidos ordenó la expulsión de tres diplomáticos venezolanos del país en respuesta a una medida similar adoptada por las autoridades de Caracas la semana pasada, informó hoy a Efe una fuente del Departamento de Estado.

El Gobierno estadounidense ha dado 48 horas para abandonar el país a los tres funcionarios de la embajada venezolana en Washington, identificados como Ignacio Luis Cajal Ávalos, Víctor Manuel Pisani Azpurua y Marcos José García Figueredo, quienes han sido declarados “persona non grata”.

La medida se ha tomado “en respuesta a la decisión del Gobierno venezolano de declarar persona non grata el pasado 17 de febrero” a los tres funcionarios norteamericanos, y “de acuerdo con el artículo 9 de la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas”, indicó a Efe una fuente del Departamento de Estado, que pidió el anonimato. ”Esta convención permite a Estados Unidos declarar a cualquier miembro de una misión diplomática persona non grata en cualquier momento y sin necesidad de precisar un motivo”, señaló.

La orden de expulsión se emitió el lunes a última hora de la tarde, según precisó a Efe otro alto funcionario estadounidense, que pidió también el anonimato. El Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha atribuido las protestas que vive el país desde hace dos semanas a un intento de desestabilización orquestado desde Estados Unidos, y el 17 de enero anunció la expulsión de tres funcionarios de este país, a los que acusó de promover la subversión en las universidades.

La secretaria de Estado adjunta para Latinoamérica, Roberta Jacobson, se reunió el pasado viernes con esos tres funcionarios y aseguró que el Departamento de Estado tomaría medidas para responder a su expulsión de Venezuela.

Entre los funcionarios venezolanos expulsados, dos ocupaban el cargo de “primer secretario” en la embajada -Cajal Ávalos y Pisani Azpurua- y el tercero, García Figueredo, tenía el puesto de “segundo secretario”, de acuerdo con el Departamento de Estado.

Venezuela y Estados Unidos retiraron a sus embajadores en 2010 y desde entonces ambas misiones diplomáticas han ido perdiendo representación debido a las crecientes tensiones bilaterales.

El pasado octubre, Estados Unidos expulsó a Calixto Ortega, el encargado de negocios venezolano en Washington; la segunda secretaria de la Embajada venezolana en la capital, Mónica Alejandra Sánchez Morales; y la cónsul en Houston, Marisol Gutiérrez de Almeida.

Lo hizo en respuesta a la expulsión de Venezuela de la encargada de negocios de EE.UU., Kelly Keirderling; además de la de Elizabeth Hoffman, de la sección política, y la del vicecónsul Dave Moo, acusados de reunirse con “la extrema derecha venezolana” con el fin de dar apoyo para activar planes de sabotaje y desestabilización.

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