No hay muchos austriacos contentos con los meses de retraso que lleva la repetición de las controvertidas y problemáticas elecciones presidenciales. Pero Flora Maier sí lo está.
No hay muchos austriacos contentos con los meses de retraso que lleva la repetición de las controvertidas y problemáticas elecciones presidenciales. Pero Flora Maier sí lo está.
Flora, de la región de Alta Austria, tenía 15 años cuando se llevaron a cabo las primeras dos rondas de votación en abril y mayo, y por lo tanto era demasiado joven para participar.
La amiga de Flora, Lena Ramaseder, quien cumplió 16 años en marzo, sí pudo votar en la primera ronda.
Estas son unas elecciones que podrían dar a la Unión Europea (UE) su primer jefe de Estado de extrema derecha: Norbert Hofer.
Pero Flora, que ya cumplió los 16 el 23 de mayo, ahora tendrá la oportunidad de depositar su voto en la repetición de los comicios que se llevará a cabo el 4 de diciembre.
Al igual que ella lo harán otros 45.600 adolescentes.
«Estaba muy contenta cuando lo escuché», me dijo. «Para mi es importante expresar mi opinión».
Austria ha estado durante meses intentando elegir un presidente, pero los planes han fracasado.
En mayo, Alexander Van der Bellen, antiguo miembro del Partido Verde, perdió por un estrecho margen (menos de 1%) las elecciones presidenciales frente al candidato de extrema derecha, Norbert Hofer.
Pero los resultados fueron anulados por la Corte Suprema debido a problemas con la forma como los votos postales fueron contados.
Austria estaba lista para celebrar una repetición del voto el 2 de octubre, pero la fecha fue postergada para el 4 de diciembre.
Pero lo que empezó como un gran fiasco por los votos postales, se ha convertido en un escándalo que ahora ha sido bautizado «pegamentogate».
Hace unas semanas se dio a conocer que cientos o quizás miles de formularios para votos postales no habían sido sellados adecuadamente, debido a que el pegamento utilizado no pegaba.
El Ministro del Interior Wolfang Sobotka indicó que como resultado de los «sobres defectuosos», existía el riesgo de que los votos hubieran sido alterados.
Ahora tendrán que cambiarse las leyes para permitir llevar a cabo el voto con el retraso programado.
Eso significa que Flora y los otros 45.600 adolescentes que acaban de cumplir 16 años serán incluidos esta vez.
Los sondeos recientes dan a Norbert Hofer una pequeña ventaja. Pero, igual que muchos de sus amigos, Flora votará en contra del candidato de extrema derecha.
«La situación es un poco extraña», me dijo Flora. «Pero personalmente, esto me da la oportunidad de votar».
El analista político Thomas Hofer (no tiene vínculos familiares con Norbert Hofer), afirma que la inclusión de adolescentes que cumplieron 16 años después de la primera ronda electoral podría dar «una pequeña ventaja» a Alexander Van der Bellen.
«Él obtuvo más apoyo con los electores jóvenes que Norbert Hofer. Hubiera sido una desventaja excluirlos. Pero la gente de más de 60 años dio un poco más apoyo a Van der Bellen y muchos de ellos están muriendo», afirma.
El retraso en la votación ha sido extensamente criticado. Thomas Hofer afirma que la elección es una «vergüenza» para Austria tanto internacional como nacionalmente.
«En la esfera doméstica, la confianza en el sistema político, que de cualquier forma es muy poca, se ha visto más erosionada».
Para Lena Ramaseder, quien votó por primera vez en abril y mayo, la situación se está «volviendo un poco ridícula».
«Es algo triste que no podamos ser capaces de fijar una fecha y llevarlo a cabo pronto».
Norbert Hofer
Alexander Van der Bellen
