El diario The Washington Post asegura que Jared Kushner discutió con Sergei Kislyak, embajador ruso en Washington, la posibilidad de habilitar un canal seguro y secreto de comunicación con el Kremlin para el equipo de transición del presidente Donald Trump.
El diario estadounidense The Washington Post asegura que Jared Kushner, yerno del presidente, Donald Trump, y asesor de la Casa Blanca, y el embajador ruso en Estados Unidos, Sergei Kislyak, discutieron el pasado diciembre «la posibilidad de abrir un canal de comunicación secreto con el Kremlin».
Según el diario, que cita fuentes de inteligencia estadounidenses no identificadas, Kushner propuso que los contactos entre el equipo de transición de Trump y el gobierno de Moscú se realizaran en instalaciones diplomáticas rusas.
El fin sería proteger la privacidadde las comunicaciones previas a la toma de mando de Trump, explica The Washington Post.
La propuesta -que Kushner habría realizado en un encuentro que tuvo en la Torre Trump de Nueva York con el embajador ruso en 1 o 2 de diciembre- habría «sorprendido» a Kislyak, de acuerdo a este mismo periódico, por el «riesgo de seguridad» que suponía.
Ni la Casa Blanca ni las autoridades rusas han hecho comentarios sobre esta información hasta el momento.
El abogado de Jard Kushner ha dicho públicamente que su cliente está dispuesto a compartir el Congreso estadounidense la información sobre sus contactos con el embajador Kislyak.
The Washington Post señala que la información que publicó este viernes, que habría sido obtenida por las agencias de inteligencia estadounidenses mediante la interceptación de las comunicaciones del embajador ruso con Moscú, podría no ser correcta.
Según el diario, es práctica habitual de los funcionarios diplomáticos rusos el pasar a sus superiores información falsa o alterada para confundir a las agencia de inteligencia extranjeras.
El jueves, medios en EE.UU. aseguraron que Kushner está «bajo escrutinio» del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), en el marco de la investigación sobre la supuesta interferencia de Rusia en las elecciones de 2016.
Funcionarios no identificados dijeron a la cadena estadounidense NBC que el FBI cree que el asesor de 36 años tiene información relevante para ellos, aunque esto no significa que haya cometido un delito o que lo vayan a acusar de algo.
También explicaron al medio que Kushner está en una categoría distinta a la del ex asesor de seguridad de Trump, Michael Flynn, que sí es formalmente sujeto de una investigación.
En marzo, la Casa Blanca reconoció que algunos de los actuales funcionarios del gobierno mantuvieron contactos con funcionarios rusos -como el embajador ruso en Washington Sergey Kislyak- incluyendo a Kushner; al fiscal general, Jeff Sessions; y al secretario de Estado, Rex Tillerson.
El viernes 19 de mayo, medios en EE.UU. ya habían señalado que un asesor de la Casa Blanca cercano a Donald Trump -que en ese momento no fue identificado como Kushner- se encontraba en la mira de la investigación de la supuesta intromisión de Rusia en las elecciones de noviembre.
Citando a fuentes «familiarizadas con el tema», el diario The Washington Post dijo que la identificación del «alto funcionario» mostraba que «la investigación está llegando a los niveles más altos del gobierno».
