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María Bonita: cuando el amor fue un gran bolero


María Félix acaba de morir (1914-2002). Dicen que expiró pocas horas antes de cumplir los 88 años. Los diarios mexicanos, y de donde sea, le rinden su homenaje a esta mujer que según Carlos Monsiváis «era una obra de arte en sí misma».



Fue una actriz exclusiva del cine mexicano, pero cuando el cine de aquel país era tan poderoso y más influyente que el cine de Hollywood en América Latina. Los momentos de gloria de María Félix transcurrieron desde mediados de los años ’40 a los ’60, pero mantuvo e incluso acrecentó su leyenda en las décadas que siguieron. Para los mexicanos siempre fue la diosa, la reina, la Doña o la incomparable María Bonita.



Dicen que era «una belleza que dolía mirarla» (en palabras del escritor y director de cine Jean Cocteau). Hasta Diego Rivera quedó paralizado por ella: por eso algún biógrafo le inventó un romance (que nunca tuvo) cuando el famoso pintor y muralista casado con Frida Kahlo le hizo un retrato.



Pero fue Agustín Lara el primer afortunado (antes del charro Jorge Negrete). Compositor y cantante que físicamente no era nada de agraciado, logró -nadie aún sabe cómo- el corazón de María Félix. Fue en 1948: ella tenía 34 años y él 51. Nadie podía entender en ese entonces cómo se casó con «un hombre tan feo».



El romántico compositor le escribió luego una canción, un bolero, inspirado cuando estaban de luna de miel en Acapulco. Fue al verla junto al reflejo de la luna en el mar. Y a pesar de la cursilería que Agustín Lara a veces derrochaba en sus letras, así y todo Maria Bonita se sigue cantando, alguien dijo que por el ritmo musical y la letra, aunque otros apuntan que el misterio maravilloso de esa canción era justamente repetir lo que no se entendía.



Agustín Lara había creado lo que hasta la fecha es una de las canciones mexicanas más populares y más conocidas, no sólo en su país sino en todo el mundo hispano.



Hace unos meses, leyendo la revista Cambio, de Gabriel García Márquez, me encontré con una deliciosa crónica sobre la relación entre el compositor Agustín Lara y la actriz mexicana María Félix. Como no soy plagiario de nada, la reproduzco justo cuando María Bonita se ha ido con su belleza a otro mundo. La crónica que puede verse con un click aquí es de la pluma de Juan Gossaín.



«Se fue el sueño» escribió el diario La Jornada de México el 9 de abril en grandes titulares de primera pagina. Pero lo que es cierto es que ella seguirá en la memoria de los que en los ’40, ’50 y ’60 en América Latina la adoraron hasta el frenesí.



* Escritor y académico chileno que reside en Estados Unidos.

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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