La disminución conjunta de la producción y de las ventas de las empresas extranjeras deberían ser en un porcentaje bastante mayor al de Codelco, ya que son ellas las que han creado desde Chile la sobreproducción, afectando seriamente a Codelco y transformando la principal riqueza básica del país, paradójicamente, en la causa fundamental que explica el inicio y la posterior difusión de la crisis al conjunto de la economía chilena.
Si las 5 ó 6 grandes empresas mineras mundiales de cobre toman decisiones en el mismo sentido a las informadas por Codelco en el día de hoy, puede corregirse en parte importante la distorsión del mercado mundial creada fundamentalmente desde Chile por esas mismas grandes empresas mineras mundiales.
Codelco anunció este 29 de noviembre de 2002 una disminución de sus ventas en 200 mil toneladas, pero mantiene sus planes de producción. Estas 200 mil toneladas las mantendrá como inventario en Chile, fuera del mercado. Codelco afirma que «a la fecha, los inventarios de cobre fino acumulados en las bodegas de las bolsas de metales de Londres, Nueva York y Shanghai ascienden a 1 millón 370 mil toneladas métricas. La mayor parte de los especialistas en cobre coinciden en que esta situación no variará sustancialmente durante el próximo año. Este nivel de inventarios excede con largueza el necesario para garantizar un abastecimiento oportuno de los fabricantes, transformadores y otros consumidores».
Esta medida está relacionada sin duda con una serie de estudios críticos sobre la política minera chilena que se realizan desde hace varios años, y particularmente con el seminario que se realizó este 28 de noviembre de 2002) bajo el título «El Cobre, Imperativo Del Desarrollo Nacional», realizado en la Casa Central de la Universidad de Chile.
El seminario fue patrocinado por más de quince universidades chilenas, por la Federación de Trabajadores del Cobre y la Confederación Minera, la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (FECH) y otras federaciones universitarias, el Comité de Defensa del Cobre, y otras Instituciones. En la inauguración intervinieron los rectores de las universidades de Chile, la República y Usach.
Participaron activamente el senador Jorge Lavanderos, el Presidente de la Comisión de Minería de la Cámara de Diputados, Carlos Vilches, y Juan Villarzú, presidente de Codelco.
También presentaron los resultados de sus investigaciones distintos académicos, entre ellos miembros de la Fundación Terram, Cenda y del Cetes.
En la reunión de cierre se resumió el estado actual de las demandas jurídicas e hizo uso de la palabra Armando Uribe abogado, escritor y poeta, quien fue catedrático de Derecho Minero Internacional durante muchos años en la Universidad de Chile. Demostró la inconstitucionalidad de la ley que otorga la propiedad privada de los yacimientos mineros a las empresas extranjeras.
En el seminario se señaló que los stocks globales de las bolsas de metales y de las empresas usuarias comercializadoras y productoras superan 3 millones 200 mil toneladas. Esta cifra coincide con las informaciones más recientes de Cochilco, y contempla 1 millón 370 mil toneladas que se señalan en el comunicado de prensa de Codelco, el cual se refiere sólo a los inventarios en las bolsas de metales. La situación es tan grave que los stocks globales mundiales equivalen al crecimiento de la demanda mundial de cobre de los próximos 5 ó 6 años.
Por lo anterior, en el seminario se señaló que los stocks deben disminuir en aproximadamente 2 millones de toneladas, una parte como disminución de la producción y otra por inventarios reguladores, como lo habían señalado algunos estudios críticos hace un tiempo.
Las grandes mineras mundiales deberían disminuir la producción en sus empresas en otros países y en Chile. También deberían formar un stock regulador. La disminución conjunta de la producción y de las ventas de las empresas extranjeras deberían ser en un porcentaje bastante mayor al de Codelco, ya que son ellas las que han creado desde Chile la sobreproducción, afectando seriamente a Codelco y transformando la principal riqueza básica del país, paradójicamente, en la causa fundamental que explica el inicio y la posterior difusión de la crisis al conjunto de la economía chilena.
La disminución de la producción en Chile no debería afectar los ya bajos niveles de ocupación. Esto es posible si la producción se traslada a aquellos lugares de los yacimientos con menor ley. Además, se deberían posponer la ampliación de las empresas existentes y del desarrollo de nuevas empresas mineras en la industria del cobre.
Si las empresas extranjeras no proceden según lo señalado, una vez más estarían beneficiándose con el cobre chileno que ya ha dejado de ser la viga maestra y el sueldo de Chile, dañando aún más a Codelco.
En el seminario se señaló que Chile debe recuperar el derecho a cobrar por el valor del cobre en los yacimientos que ahora se lo apropian las empresas extranjeras, lo que es la causa principal, junto al no pago de impuestos, de la distorsión del mercado mundial del cobre.
(*) Senador, miembro de las comisiones de Minería y Economía/Director de Cetes.
