Publicidad

Los hinchas han encogido


No sólo en Chile los hinchas están huyendo de los estadios. El asunto no está relacionado con la violencia o calidad de las confrontaciones deportivas. Se trata principalmente, de un problema de comunicación. El deporte ha sido alegría para hinchas y redes de televisión, entre otros. Ahora los hinchas están vistiendo la camiseta de sus equipos con menos ardor.



Una investigación de la televisión por cable ESPN, reveló que en los últimos 5 años la base de fanáticos por los 4 deportes más importantes en los Estados Unidos, como el fútbol americano, béisbol, básquetbol y hockey, cayó 5% y cada vez menos hinchas hacen votos de fidelidad por estos deportes.



Una nueva generación que ha crecido con los videogames y la soledad de las computadoras, parecen menos interesados en los millonarios atletas de carne y hueso. Se trata de la generación del dedo pulgar, jóvenes hasta los 15 años de edad.



Esto es muy preocupante para las grandes redes de televisión, porque los hinchas deportivos están entre los espectadores más fanáticos, y lo que es o era más importante, codiciados por los anunciantes.



Hay un hecho claro, la audiencia del deporte está cayendo en los Estados Unidos, para que hablar en Chile. En el caso de la NFL, la liga del fútbol americano, la caída fue de un 13% en cinco años.



Por otro lado un estudio del Banco de Inversiones Moag & Company muestra que entre 1990 y 2000 el valor de los equipos se quintuplicó, triplicó en el caso del béisbol y el jokey y más se dobló en el basquetbol. De esta forma la industria deportiva pudo generar mayores recursos por derechos de transmisión de los partidos.



Allí estaba la gallina de los huevos de oro de las últimas décadas.



Pero las cosas comenzaron a cambiar. Un estudio del mismo banco, publicado recientemente, señalaba que mientras los 4 deportes recibían 744 billones de dólares por derechos de transmisión, el año pasado, esta cantidad se había reducido significativamente.



Las 4 cadenas NBC, CBS, ABC Y FOX están perdiendo como en la guerra. Según el mismo estudio las pérdidas del 2002 se estiman en 600 millones de dólares.



Como resultado, las redes están migrando al deporte por cable con subscripción especial pagada que tiene audiencia menor.
El próximo año, la NBA (liga del basquetbol) debe transferir 127 juegos en la televisión por cable y 96 de ellos serán mostrados en una nueva emisora, NBA-AOL. Cualquier parecido con los intentos del Canal del Deporte en Chile, es coincidencia premeditada.



Todas estas jugadas hacia la TV por cable, son inciertas. El espectador es fanático, pero le gusta lo bueno y gratis.



Otra historia parecida sucede en Inglaterra. La ITV Digital, una operadora por cable , anunció que no puede pagar los US$260 millones prometidos a los 72 equipos de segunda división del fútbol. Cosa parecida sucede en Alemania donde la cadena Kimde quebró, después de pagar US$329 millones a varios equipos.



En el caso del soccer en los Estados Unidos, la situación en peor aún. Desde 1994 cuando el país fue sede del fútbol se esperaban buenos resultados, pero ahora nadie compró los derechos de transmisión. Al parecer están jugando los descuentos.



En síntesis, la Thumb Generation o generación del dedo pulgar, no se interesa por los deportes como nosotros. Ellos entienden todo a través de la pantalla de las computadoras y de los juegos electrónicos.



Ir a un estadio y ver un partido de fútbol o básquetbol, no están dentro de sus prioridades así como lo fue, en su tiempo, con el trompo, las bolitas y el pillarse. Esto ocasionará un cambio sin precedentes para las nuevas generaciones. Las señales son evidentes.



Prepárese para ver estadios con poco público y deportes con serios problemas económicos por la falta de asistentes sumado a un crecimiento exorbitante de juegos electrónicos de todos los deportes.





________________



Fernando Vigorena Pérez. Ingeniero Comercial y Master en Administración de Empresas-MBA. www.fernandovigorena.cl












  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
Publicidad

Tendencias