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Uso eficiente de la energía y el cambio climático


Hace algunos días, se dieron a conocer públicamente los resultados del estudio: «Variabilidad Climática en el Territorio Chileno en el Siglo XXI» que CONAMA encargó al Departamento de Geofísica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile. Este estudio arrojó conclusiones que nos permiten hacer estimaciones científicas de distintos escenarios climáticos para diferentes regiones de Chile durante el presente siglo.



Durante la investigación se construyeron dos escenarios climáticos de probables impactos para fines de esta centuria: uno moderado y otro severo, de acuerdo a supuestos en el futuro desarrollo del mundo en el ámbito económico, demográfico, tecnológico, de políticas ambientales y equidad social. Estos escenarios fueron considerados en el último informe del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC).



Afortunadamente, Chile se encuentra impulsando desde hace ya varios años, tanto en el ámbito nacional como en el internacional, diversas acciones tendientes a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y así también, disminuir los impactos del calentamiento global en nuestro territorio.



Una acción de particular relevancia consiste en impulsar el uso eficiente de la energía como medio para reducir los gases que provocan el efecto invernadero. Este uso eficiente ahorra costos a la ciudadanía, aumenta la productividad industrial, y es beneficioso para el medio ambiente. Precisamente por ello, la Comisión Nacional del Medio Ambiente, forma parte del Comité Publico-Privado a través del cuál opera el Programa País de Eficiencia Energética (PPEE).



Este año continuaremos trabajando, CONAMA y el PPEE, en la ejecución de diversos proyectos relativos a este tema. Uno de ellos, orientado a la educación, busca asegurar la incorporación de la Eficiencia Energética (EE) como un componente de la formación ambiental en las escuelas pertenecientes al sistema nacional de certificación ambiental escolar.



De igual modo, se está apoyando la definición del marco institucional para el combustible biomasa-leña. El objetivo de este proyecto, en una primera etapa, consiste en generar antecedentes técnicos relacionados con la eficiencia energética de los artefactos de uso residencial que operan con leña, insumo que servirá para estimar los beneficios de contar, en el corto plazo, con un marco institucional capaz de asumir la gestión pública del combustible biomasa y artefactos.



En suma, se ha demostrado que el uso de instrumentos orientados a mejorar la eficiencia energética a distintas escalas: residencial, industrial, comercial, transporte, etc. pueden lograr reducciones importantes en las emisiones de los gases que generan el Cambio Climático.



En Conama estamos conscientes de este desafío, y trabajaremos incansablemente por difundir y crear conciencia sobre la importancia de la eficiencia energética y el cuidado del medio ambiente.



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Ana Lya Uriarte, directora ejecutiva de la Conama

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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