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El escándalo de las pensiones vitalicias AFP (I)


La discusión del proyecto de ley de reforma previsional avanza en el Parlamento y aparentemente, al menos, se ha logrado la anuencia del gobierno para introducir una cotización patronal para pagar el seguro de invalidez y sobrevivencia, el que en lo sucesivo sería contratado centralmente por el Estado. Aparte de ello, al parecer se están logrando corregir inaceptables defectos del proyecto, como la pretensión de subir a 65 años la edad de jubilación de las mujeres que van a recibir la nueva pensión básica, o retrasar el calendario de entrega plena de ésta para las calendas griegas. Igualmente parece avanzar la AFP estatal, entre otras mejoras al proyecto. Parece indispensable, adicionalmente, que el Parlamento ponga coto al escándalo de las pensiones vitalicias del sistema de AFP. En su forma actual, es el único seguro en que la prima se paga al contado y por adelantado. En este caso, obligan al asegurado a traspasarles la totalidad de su fondo de pensiones. A causa de ello, principalmente, además de las elevadas primas de invalidez y sobrevivencia, las compañías de seguros relacionadas con la previsión se están apoderando de parte significativa de las cotizaciones de los afiliados. Si a ello se agregan las comisiones cobradas por las AFP, ambas industrias en conjunto se han apoderado del equivalente a uno de cada tres pesos cotizados en el sistema entre 1982 y 2006.



Se sabía que las AFP han descontado en comisiones un peso de cada cinco cotizados por los afiliados. Un reciente estudio de CENDA (www.cendachile.cl) demuestra que, en conjunto, las AFP y Cías. de Seguros -las cuales pertenecen a los mismos conglomerados- se han embolsado uno de cada tres pesos cotizados en el sistema. Adicionalmente, el fondo de pensiones se ha invertido en su mayor parte en bonos y acciones de empresas que pertenecen a no más de doce de grandes grupos privados, entre ellos los propietarios de las AFP. El trabajo muestra los resultados para sus afiliados del sistema de AFP y las cías. de seguros relacionadas con el negocio, consideradas ambas industrias en su conjunto, a lo largo de los 25 años.



A diciembre del 2006, el sistema previsional privado pagó 606 mil pensiones, sin embargo, sólo 163 mil son de vejez, siendo la mayor parte pensiones anticipadas y otros beneficios no percibidos por adultos mayores. Ello se compara con 1,2 millones de pensiones otorgadas por el sistema público a adultos mayores, de un total de 1,6 millones de pensiones públicas el 2004. La mayor parte de las pensiones del sistema privado -dos tercios de las mismas a lo largo de toda su historia y un 70% en la actualidad- no son pagados por las AFP sino por cías. de seguros. Del mismo modo, estas empresas se embolsan la mayor parte de las comisiones, primas y gabelas cobradas por el sistema. El balance entre 1982 y 2006 muestra como los afiliados han aportado un total de 27,3 billones de pesos en cotizaciones obligatorias -cifra equivalente a más de la mitad del PIB de 2005- y 2,9 billones en otros aportes netos, mientras los pensionados por el sistema privado han percibido beneficios por 4,4 billones de las AFP, y adicionalmente 5,4 billones en pensiones vitalicias y otras pagadas por las Cías. de seguros. Al mismo tiempo, sin embargo, el Fisco ha aportado al sistema un total de 6,1 billones de pesos en bonos de reconocimiento y subsidios de pensiones mínimas, que equivalen a dos tercios de todos los beneficios pagados por el sistema.



Lo más impactante, sin embargo, es que las AFP y Cías. de seguros en conjunto se han embolsado un saldo neto -es decir, comisiones y primas menos beneficios pagados- de 9,3 billones de pesos a favor de ellas mismas, del cual las primeras han cobrado 4 billones y las segundas 5,3 billones (todas las cifras se presentan en billones, es decir, millones de millones de pesos de diciembre 2006, cuando no se indica otra cosa).



Las AFP devengaron comisiones de sus cotizantes por 5,9 billones de pesos entre 1982 y 2006, lo que equivale al 21,1% del total de cotizaciones obligatorias, las que alcanzaron a 27,8 billones en el mismo período, como se ha mencionado. Esta cifra incluye las comisiones de administración de las propias AFP, y las primas de seguros de invalidez y sobrevivencia, que contratan por cuenta de los afiliados con cías. de seguros relacionadas con el negocio. Las AFP traspasaron a las cías. de seguros 1,8 billones por este último concepto, mientras se embolsaron directamente poco más de 4 billones de pesos en comisiones de administración propiamente tales.



Se sabe que las comisiones de administración cobradas por las AFP son muy elevadas. Baste recordar que anualmente representan cuatro veces el costo de operación del INP. Esta última institución, sin embargo, paga casi todas las pensiones que reciben los adultos mayores, además de proporcionarles diversos beneficios adicionales como vacaciones y otros, recauda todas las cotizaciones del FONASA, tiene mayor cobertura nacional que el sistema de AFP y por si fuera poco, administra asimismo un fondo de pensiones considerable.



Sin embargo, por elevadas que resultan las comisiones de administración cobradas por las AFP, las cías. de seguros relacionadas con el negocio previsional han representado un costo aún mayor para los afiliados. En efecto, si las AFP cobraron comisiones de administración por 4 billones de pesos entre 1982 y el 2006, las cías. de seguros se embolsaron primas netas anticipadas y otros excedentes por 5,3 billones en el mismo período. La última cifra es la diferencia entre los 8,9 billones que las AFP les han traspasado en primas de pensiones vitalicias, además de 1,8 billones en primas de invalidez y sobrevivencia, menos las rentas vitalicias y cubiertas por el seguro pagadas por estas cías.



La diferencia entre las primas de seguros de invalidez y sobrevivencia traspasados por las AFP a las cías. de seguros y las pensiones pagadas por estas últimas empresas bajo la modalidad «cubiertas por el seguro» es muy sustancial. De hecho, las primas de invalidez y sobrevivencia suman más de 1,8 billones de pesos desde 1982 a 2006, mientras las pensiones pagadas en la modalidad referida alcanzan a poco más de 0,6 billones en el mismo período, es decir, alrededor de la tercera parte de las primas. Las cías. de seguro se embolsaron casi 1,2 billones de pesos en utilidades netas por esta diferencia. Se ha criticado que las AFP aumentan constantemente las primas de invalidez y sobrevivencia que cobran a sus afiliados, mientras la siniestralidad por este concepto aumenta mucho menos. Las cifras anteriores parecen dar la razón a estas críticas. Se ha hecho notar que las más de las veces las AFP contratan los seguros con cías. relacionadas con sus grupos controladores, de modo que parte de estos cobros serían una manera de ocultar utilidades, transfiriéndolas desde las AFP a las últimas cías. Por este motivo, la reforma en curso ha propuesto centralizar en la SAFP la licitación anual de los seguros de invalidez y sobrevivencia, lo cual ha sido fuertemente resistido por las AFP.



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Manuel Riesco. Economista Cenda

  • El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de El Mostrador.
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