Señor Director:
Es muy significativo que en esta fecha cercana a Semana Santa, donde recordamos el más grande acto de amor de la humanidad; Jesucristo muere en la cruz por nosotros, se produzca un hecho notable, que como sacerdote y miembro de la Iglesia Católica me ha dado pie para reflexionar.
La semana pasada el abogado Pablo Ruiz-Tagle fue asaltado en el barrio de Providencia, le arrebataron su celular, mientras él hablaba, su reacción fue de inmediato seguir a este delincuente, hasta encontrarlo, paralelamente las personas que circulaban en esos momentos por las calles, adhirieron con él y también siguieron a este asaltante, con toda la intención de lincharlo, en el momento que se sube a un bus del Transantiago.
Es en este momento que se produce una actitud digna de imitar, el señor Ruiz-Tagle impide que su asaltante sea violentado por la multitud, hasta que finalmente llega Carabineros de Chile y el delincuente es detenido. El abogado declara a un medio de prensa que no está de acuerdo con la Ley de la Selva, ya que la delincuencia se debe a que estamos en un país con grandes desigualdades.
Dijo Jesús: “el que a hierro mata a hierro muere”. Justamente; no podemos responder con violencia frente a la violencia… ¿Cuántos hombres y mujeres, no serían delincuentes, si hubieran recibido más amor y más oportunidades por parte de la sociedad?.
