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Hernán Larraín y su postura sobre los votos con la marca «AC»

Por: Jorge Contesse


Señor Director:

El jueves, el senador de la UDI Hernán Larraín, hizo el siguiente comentario en Twitter: «Marcar con AC los votos, sin duda, los anula. Sino, ¿por qué no poner Dios, como acto de fe, o NAC (No a la AC), etc? ¡Los votos no se marcan!”.

Examinar separadamente cada una de las frases de su comentario permite aclarar algunas posibles dudas que pueda haber sobre este tema.

1.- “Marcar con AC los votos, sin duda, los anula”

Falso. Según lo que dispone la ley y tal como lo ha dicho el Servicio Electoral de Chile (a través del presidente de su Consejo Directivo), los votos que contengan una preferencia electoral por algún candidato o candidata presidencial y además una marca —por ejemplo, “AC”— son válidos.  Se cuentan para el candidato o candidata y además se deja registro —es decir, se anota— que ese voto tiene una marca.  Marcar con AC los votos no los anula.

2.- “Sino, ¿por qué no poner Dios, como acto de fe, o NAC (No a la AC), etc?”

Si quiere lo puede hacer. Desde un punto de vista legal, si marca su preferencia a favor de la candidata de su coalición y además escribe “Dios” o “NAC” su voto va a ir para Evelyn Matthei. Y, junto con ello, se anotará como voto marcado. Nada más.

Ahora, el senador se pregunta por qué no hacerlo. La respuesta es obvia: no necesita. Nadie le impide creer en Dios. Es un acto personalísimo, para el cual no necesita a otros. Si aun quiere hacerlo, está en su derecho, por supuesto, pero es poco conducente.

En cambio, las personas que marcan AC sí necesitan a otros. Para que el mensaje tenga más resonancia, por una parte, y porque además una convención constituyente es por definición un mecanismo que busca la participación de todos. Es obvio entonces que no es lo mismo escribir “Dios” que “AC” (aunque en ambos casos, el voto es válido).

Y si el senador quisiera escribir “No a la AC”, también puede hacerlo. En ese caso, de hecho podría llamar a otros a marcar “NAC”; sería aun más democrático. Así, todos contamos.

3.- ¡Los votos no se marcan!

Esta frase debe entenderse como una indicación a sus seguidores en la red social para que no marquen sus votos. Ellos verán lo que hacen, por supuesto. Lo importante es que sepan que las razones que el senador da para no marcar AC son falsas (los votos son nulos),  inútiles (escribir “Dios” como un acto de fe) o muy buenas (que otros marquen “NAC”).

Miles de personas apoyan la campaña “Marca Tu Voto” y seguro hay muchos en contra de ella. Se puede estar incluso en desacuerdo con una Asamblea Constituyente. Lo que no se puede hacer, menos alguien que detenta un alto cargo de representación política, es desinformar y utilizar argumentos falsos para oponerse a algo. El Congreso Nacional se ha formado una pésima imagen en la ciudadanía; es responsabilidad de todos cuidar las instituciones que tenemos, especialmente quienes trabajan en ellas, como el senador Larraín.

Jorge Contesse

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