Quizás a muchos haya sorprendido la creación de una bancada por la Asamblea Constituyente, creada por un grupo de diputados y senadores. Quizás a usted le sorprendió, como a mí, que en esta participen varios honorables del pacto de la Nueva Mayoría, con lo que sepultarían la alternativa de una Nueva Constitución por vía parlamentaria. O quizás también le sorprendió la paradoja que fueran diputados, beneficiarios de un sistema poco democrático y representativo, quienes impulsarán una iniciativa más bien identificada con la ciudadanía y no con el establishment, especialmente en nuestra realidad bastante institucionalizada.
Espero, eso si, que no sorprendiera que la Asamblea Constituyente se instale como la alternativa para la promesa de Nueva Constitución. Somos muchos los que entendiendo, que Chile cambió, sabemos que no hay otra alternativa que pueda devolver a la democracia su legitimidad. Es la mejor forma de romper con las cadenas y trabas de la representación y participación ciudadana y poder reformular, en serio, la forma de hacer política, de cara a la gente.
Al menos, la recién creada bancada hizo la lectura correcta, entendió que cada vez más se deslegitiman las instituciones donde por tanto tiempo depositamos nuestras esperanzas de cambio, pero que a pesar de esfuerzos y promesas, la ciudadanía seguía un camino de empoderamiento que indefectiblemente terminaría en este proceso.
Aún queda por definir como se hará presente esta bancada, pues aún es paradojal, que de una de las instituciones más cuestionadas para llevar a cabo un proceso constituyente tome las banderas de este desarrollo nacido y empujado por la ciudadania y fuerzas políticas fuera del duopolio. Por esto último, las esperanzas se cifran en diputados que se encuentran desde el lado independiente, quienes deberían situarse como los líderes, toda vez que la Nueva Mayoría tendrá que lidiar en su interna con un nuevo flanco de desencuentros en tan amplio conglomerado.
Podemos mirar con mayor esperanza el futuro de una ansiada Asamblea Constituyente, continuaremos preparándonos e informándonos y sentando las bases de este nuevo camino, que cada vez esta más cerca y cada vez es más posible. Chile cambió y el cambio finalmente lo alcanzará.
(*) Texto publicado en El Quinto Poder.cl
