El ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago sometió a proceso en calidad de cómplice al ex jefe de operaciones de la disuelta CNI por el asesinato de la mirista Paulina Aguirre Tobar.
Estaba previsto que a Alvaro Corbalán, detenido en el Comando de Telecomunicaciones del Ejército, le fuera notificado a las 13 horas en la Corte de Apelaciones de Santiago que fue sometido a proceso en calidad de cómplice por el asesinato de la mirista Paulina Aguirre Tobar.
A dicha comunicación Alvaro Corbalán debía concurrir personalmente para ser notificado por el ministro en visita, Jorge Zapeda.
Por este mismo caso, la semana pasada Zepeda sometió a proceso por homicidio calificado a dos ex agentes de la brigada azul de la ex CNI identificados como Alejandro Astudillo Adams, ex oficial de la FACH, y a Miguel Soto Estuardo.
Zepeda heredó las causas de Derechos Humanos que investigaba Juan Guzmán Tapia, entre las que se encontraba la de la mirista Aguirre Tobar, asesinada el 29 de noviembre de 1985 en su domicilio de la comuna de Las Condes.
Corbalán, en tanto, luego de que los ex agentes de la CNI fueran procesados, declaró ante Zepeda y le habría entregado importantes antecedentes.
El viaje a Papudo
La semana pasada Corbalán se vio envuelto en una fuerte polémica cuando el ministro Hugo Dolmestch lo autorizó a viajar a Papudo para buscar unos documentos. El magistrado aseguró que su presencia en el lugar era imprescindible, pero otras versiones aseguran que los ministros, en general, acostumbran a ser más flexibles con quienes colaboran con la justicia y que incluso Corbalán almorzó en el Club de Yates de Papudo.
La abogada representante del Consejo de Defensa del Estado (CDE) en el caso Operación Albania, María Inés Horvitz, planteará al organismo fiscal presentar una solicitud ante el ministro Hugo Dolmestch para que se evite que en el futuro el ex agente de la CNI goce de libertades en su desplazamiento, tales como lo ocurrido durante su viaje a Papudo.
Alvaro Corbalán está condenado a cadena perpetua como encubridor del asesinato en 1983 del carpintero Alegría Mundaca, delito que se cometió con la intención de responsabilizarlo, mediante una falsa carta suicida, del homicidio del dirigente sindical Tucapel Jiménez, ocurrido en 1982.
El ex agente ha gozado ya otras veces de la posibilidad de visitar su casa de Papudo, en permisos concedidos por el ministro del caso Tucapel, Sergio Muñoz, y el magistrado que investigó inicialmente la Operación Albania, Milton Juica, hoy miembro de la Corte Suprema.
__________________
Artículos relacionados:
Nuevos tiempos en el Ejército auguran fin de privilegios a militares (7 de enero de 2003)
Aseguran que viaje de Corbalán a Papudo no fue irregular (6 de enero de 2003)
Interrogan a Alvaro Corbalán por muerte de mirista en 1985 (2 de enero de 2003)
