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Con suma urgencia Mineduc intenta impedir deserción escolar

La iniciativa pretende evitar la deserción escolar en niños de familias de bajos recursos por medio de la entrega de subvenciones a los sostenedores. Para evitar cualquier irregularidad, además de la identificación de los alumnos, las instituciones deberán retenerlos, lo que será la única forma de recibir el beneficio.


Con suma urgencia -en teoría diez días en cada cámara- se envió al Congreso el proyecto que establece la Subvención Diferenciada Pro Retención. Éste considera a 209 mil 398 hogares con un total de 126 mil niños, a los que pretende dar posibilidades de estudio por medio de una subvención para establecimientos educacionales.



"En un momento en que hay una gran discusión respecto a la inequidad de la sociedad, estos proyectos apuntan a reforzar la educación de los más pobres", afirmó la ministra de Educación, Mariana Aylwin



La política pretende otorgar a los sostenedores una subvención adicional a la actual, por los niños que logren matricular y retener en el sistema escolar y que pertenezcan a las familias indigentes del país.



De ser aprobada, la Subvención Diferenciada Pro Retención permitirá que 126 mil niños ingresen en el sistema dentro de los próximos cuatro años. De estos, 112 mil asisten a establecimientos educacionales, pero tienen un alto riesgo de deserción escolar, que está ligado a las condiciones socioculturales de la familia. Por lo tanto, el factor de riesgo es más alto que en el resto. Adicionalmente, 23 mil 478 niños entre 12 y 18 años no están en el sistema escolar.



Los colegios, ya sean particulares, municipales o particulares subvencionados, que retengan a los jóvenes identificados, recibirá una subvención adicional como "un estímulo al esfuerzo que la propia comunidad educativa hace", señaló la ministra. Por tanto, de acuerdo a los recursos entregados, la responsabilidad por mantener a los alumnos en riesgo, será de los establecimientos educacionales.



La subvención, luego de ser identificados los niños, operará luego de que el alumno se matricule para el año siguiente. Por tanto el establecimiento que no cumpla con este requisito no obtendrá el beneficio. "El sostenedor tendrá que comprobar que matriculó al joven", afirmó Aylwin.



Para resguardar la transparencia del sistema, se apela a la responsabilidad de los municipios y de los sostenedores, además de que los estudiantes están identificados y por tanto es factible de fiscalizar.



Proyecciones de la puesta en marcha



Las tasas más altas de deserción se producen en primero y segundo año de educación media, no obstante, ésta se inicia en la enseñanza básica, específicamente en séptimo y octavo. Los jóvenes entre los 14 y 16 años de familias indigentes son los que presentan mayor abandono de los estudios.



Se espera que al sistema, que se inicia durante el año escolar 2003, se incorporaren 33 mil 748 niños el 2004; 36 mil 360 el 2005 y 19 mil 954 el 2006.



En términos económicos, en el primer año de iniciada la subvención se invertirían 2 mil 824 millones, monto que aumentaría para las siguientes generaciones.



El ministerio tiene contemplado otorgar 33 mil millones de pesos, que se dividen en cincuenta mil por cada niño de séptimo y octavo básico; 80 mil para alumnos de primero y segundo medio; 100 mil para los de tercero y cuarto, y 120 mil para los egresados de cuarto año de enseñanza media.



"Esta subvención se va a mantener mientras existan familias vulnerables y mientras existan jóvenes en riesgo de desertar porque su familia vive en estas condiciones", señaló Aylwin.



Con el sistema, por ejemplo, la comuna de La Pintana, que tiene 2 mil 811 niños, podría recibir 305 millones de pesos adicionales, si cumple la meta de retención escolar. En Temuco, de acuerdo a los 2 mil 408 beneficiarios, se le otorgaría 261 millones de pesos adicionales por subvención.



Incentivos para evitar deserción escolar



La mayor cantidad de jóvenes vulnerables a la deserción escolar se encuentran en la Metropolitana, Octava, Novena, Décima y Quinta regiones. Por tanto concentran la mayor cantidad de beneficiarios.



"Esto forma parte del esfuerzo país por superar la indigencia y la extrema pobreza", señaló el subsecretario de Educación, José Weinstein, al referirse a los integrantes de estas familias, que son más propicios a abandonar las escuelas. Para ello, informó, hay instrumentos en curso.



El programa Chile Solidario y el programa Puente, articulados por esta medida política, establecen una petición para que las familias mantengan a los niños en el sistema escolar, para lo cual "deben firmar un compromiso", señaló el subsecretario.



La subvención está enfocada a retener al niño, ya que está será cancelada al año siguiente, es decir, el alumno debe estar matriculado para comenzar el siguiente año de estudio "No se trata de retenerlo durante el año, sino que el sostenedor se haga cargo de que haya una continuidad del estudio y por lo tanto que los niños sean matriculados para el año próximo", afirmó Weinstein.



El proyecto se complementa con un aumento de las Becas Liceo para todos en enseñanza media. Para este año se espera un total de 13 mil, sin descartar la posibilidad de alcanzar las 18 mil en los próximos años.



"En Chile hay una cultura discriminatoria hacia los niños con problema, esto es un incentivo para que el sostenedor no se deshaga de los niños con problema, sino que incluso le convenga para tener más subvención y atender a los niños que están en riesgo de desertar", afirmó la ministra, al aludir a que los alumnos con problemas económicos muchas veces son expulsados.



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