La Comisión de Régimen Interno está a punto de culminar un estudio sobre cómo se deberán readecuar las asignaciones que los legisladores recibían para el ejercicio de su labor, con el fin de que no aumenten sus ingresos globales al incrementarse la renta de los secretarios de estado, que quedaría en 3 millones 600 mil pesos al aprobarse una de las leyes de la Agenda Probidad.
El próximo martes la comisión de Régimen Interno de la Cámara de Diputados despachará el informe donde se establecerá una reasignación de los actuales montos que los parlamentarios reciben para ejercer su labor bajo la forma de asignaciones, el cual será puesto a disposición de la ciudadanía en la página web de la corporación.
Lo anterior se debe a que los legisladores tienen constitucionalmente el mismo sueldo de los ministros, expresado en forma de dieta, el cual alcanza actualmente a un millón 778 mil 791 pesos.
Sin embargo, al aprobarse uno de los proyectos de la agenda Probidad, el que regula el sueldo de los ministros, esta dieta ascenderá a 3 millones 600 mil pesos. Por eso, antes de que se despache el proyecto de ley que aumenta las remuneraciones de los altos funcionarios públicos -Presidente de la República, ministros, subsecretarios y jefes de servicio- ,la Cámara dispuso que se debían readecuar los ítems de las asignaciones, con el fin de que el despacho de la iniciativa no significara un alza real en el sueldo final de los parlamentarios.
Como la dieta aumentará de poco más de un millón 700 mil pesos a 3 millones 600 mil, la diferencia entre ambos montos será provista por asignaciones que se terminan. De hecho, ahora los diputados sólo recibirán la dieta y dineros por gastos de representación.
Similar ejercicio deberá hacerse en el Senado.
Situación actual
Hasta el momento, los diputados reciben, en total, 10 millones 921 mil 518 pesos entre dieta y asignaciones.
La dieta líquida mensual asciende a 1.778.791 pesos, la asignación por traslado desde su región a Valparaíso alcanza al millón 65 mil 458 pesos; una asignación de bencina que se entrega en vales asciende a 195 mil pesos; y un viático de alojamiento y alimentación de un millón 347 mil 225 pesos. Todos estos ítemes no son a rendir.
Además, para arriendo de oficinas en regiones, los diputados reciben un millón 582 mil 754 pesos, que se paga contra comprobante; para contratar personal de confianza perciben un millón 839 mil 768 pesos, que se paga según contrato y con cheque nominativo, en tanto que para la secretaria del Congreso reciben 404 mil 166 pesos, que se paga con cheque nominativo.
También los diputados reciben dinero para asesorías especializadas, monto que asciende a un millón 440 mil 611 pesos y que se paga con boleta o factura, y para un asesor en computación: 577 mil 267 pesos, que se paga con cheque nominativo.
Otras asignaciones son para teléfono celular, de hasta 102 mil 456 pesos; cien mil pesos para materiales de oficina; 25 mil 80 pesos mensuales para telefonogramas y 1.500 sobres con franqueo mensual.
Además, los parlamentarios reciben tres gratificaciones anuales, de un mes de sueldo cada una, para personal contratado, cuyo total anual asciende a 5 millones 519 mil 304 pesos.
Tienen también cuatro pasajes aéreos mensuales de ida y regreso a sus regiones, y seis pasajes aéreos anuales de ida y regreso a cualquier región, excepto Isla de Pascua.
Renta tributable
Una vez que sea promulgada la ley sobre los sueldos de los ministros, la renta de los parlamentarios también será tributable, situación que no sucede en la actualidad. Con ello, el fisco tendrá una recaudación mayor, que según algunos diputados podría llegar a ser de un millón 75 mil pesos por cada integrante de la Cámara que pague el impuesto único de segunda categoría, pues pasarán a integrar el tramo económico más alto.
Otros pagarán un poco más pues reciben dos remuneraciones: por ser legislador y por efectuar otras actividades. Este grupo pagará el impuesto global complementario.
En este sentido, aún falta por definir cuál será el régimen de cotizaciones y afiliaciones que adquirirán: si se les deberá descontar por alguna AFP, el Instituto de Normalización Previsional (INP) o vía rentas vitalicias y también se deberá considerar el sistema de salud.
Además, hay otras asignaciones que disminuyen los montos que reciben, como las de arriendo y telefonía, que serán de hasta 400 mil pesos mensuales por cada diputado. Estos ítems, junto con el de bencina, ya no serán pagados al parlamentario, sino que directamente al arrendador vía cheque nominativo, cuyo contrato de arrendamiento deberá ser entregado a la Cámara y a Telefónica o Entel, en el caso de los teléfonos.
En el caso de que el diputado sea dueño de sus oficinas distritales, este monto no podrá ser empleado en otros gastos, por lo tanto, no se contará con esos fondos. Si el legislador habla más de lo que la Cámara está autorizada a financiar mensualmente, deberá colocar la diferencia de su dieta.
En todo caso, los sueldos del personal que trabaja con los diputados seguirá con la misma modalidad que hoy: cheque nominativo dirigido al trabajador, que puede estar contratado o que puede emitir boletas de honorarios.
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