Los clamores partidarios por una sanción rápida y ejemplar no tendrán respuesta en lo inmediato. La presidenta del TS, Georgina Leiro, explicó después de la comparecencia del ex ministro que el único acuerdo es iniciar una investigación para determinar si García cometió alguna irregularidad en Inverlink.
Pese al cierto revuelo interno que se generó en las filas del PPD por la figuración de Alvaro García en el escándalo de la CORFO e Inverlink, impacto que se concretó en exigencias de suspensión de militancia y hasta de expulsión, la comparecencia del ex ministro ante el Tribunal Supremo (TS) del partido derivó en un proceso jurídico interno de largo aliento y por ahora, poca resonancia.
García llegó a la sede del PPD cerca de las siete y media de la tarde y ni entonces, ni después de una hora de reunión con los miembros del TS, accedió a hacer declaraciones. De hecho, el ex secretario de Estado entregó por escrito su presentación al órgano disciplinario.
Después de la sesión, la presidenta del TS explicó que a partir de la exposición de García se inicia una investigación y por lo pronto, no hay sanciones ni resoluciones a la vista si no que se inicia una sucesión de procedimientos y que el paso que viene, para la próxima semana, es determinar y decretar las indagaciones que haya que hacer. Esto es lo que establece el auto acordado que reglamenta el trabajo del TS. Después de eso, se abre un periodo para que se aporten pruebas, y sólo después se llegará a una decisión.
El aspecto clave del paso de García a una instancia disciplinaria de su partido es que lo que el TS se abocará a investigar son las irregularidades o transgresiones que pudiese haber cometido en tanto director, accionista o consultor de Inverlink. Pero el tribunal no entrará a resolver sobre el punto que mereció el repudio ético de varios diputados y dirigentes del PPD: que habiendo sido ministro de Lagos se pusiera luego al servicio de una empresa que operaba sobre la base de ilícitos.
Duros cuestionamientos
Ayer fueron varios los cuestionamientos morales que cayeron sobre Alvaro García. Un grupo de militantes de su colectividad constituyó un llamado "Frente de Recuperación Valórica y Democrática". El presidente regional Metropolitano, Pedro Saitz, en tanto, apeló a la Comisión Etica del PPD para que se pronuncie sobre el rol que le cupo a García en el caso Inverlink.
Los diputados Enrique Accorsi y Antonio Leal, por su parte, subrayaron el tema de los conflictos de intereses y las inhabilidades. "No puede ser que personeros que ocuparon cargos importantes en la administración pública pasen de la noche a la mañana a ocupar cargos en el sector privados. Debe existir un resguardo de al menos tres años".
Sin embargo, los clamores por una sanción rápida y ejemplar no tendrán respuesta en lo inmediato. La presidenta del TS, Georgina Leiro explicó después de la sesión de anoche que el único acuerdo es que se inicia la investigación para determinar si García cometió alguna irregularidad.
Agregó que no habiendo una incompatibilidad legal entre los cargos que García desempeñó en el Gobierno y su posterior actividad privada en Inverlink, el TS no va a analizar el punto. Explicó como ejemplo, que si van a rasgarse vestiduras por este caso, con mayor razón se debió haber hecho cuando dos ex cancilleres del General Pinochet -Hernán Felipe Errázuriz y Alex Schweitzer- fungieron como abogados defensores suyos sin que nadie lo cuestionara.
Tampoco será visto por el TS el caso de Samuel Donoso, ex presidente de la entidad y hoy defensor de Eduardo Monasterio, presidente de Inverlink, procesado por soborno. Se considera, según Georgina Leiro, que no hay problema alguno en que Donoso trabaje como abogado de ejercicio que es. Sobre este caso también se le pidió a la comisión de ética del PPD que emita un pronunciamiento.
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