Con buena parte de las directivas territoriales designadas por consenso sin necesidad de elecciones, la única sorpresa de estos comicios hubiera sido una votación ínusualmente alta de la disidencia o algún factor -como la abstención- que perjudicara la legitimidad del proceso. No ocurrió ni uno ni otro.
Con euforia recibió anoche la directiva de la Democracia Cristiana el resultado parcial de las elecciones territoriales que con cerca del 70 por ciento de los votos escrutados, pasadas las 20:00 horas, proyectaban una participación superior a los 30.000 militantes.
El presidente de la colectividad, Adolfo Zaldívar, interpretó como un amplio respaldo a su conducción, puesto que de las 323 comunas, 222 llegaron a consenso de listas unitarias y se debió efectuar los comicios sólo en las 101 restantes.
"Para ser claro…aquí hay una inmensa mayoría que ha respaldado la línea del partido", dijo, lo que a su juicio resulta alentador para la directiva nacional.
El máximo dirigente demócratacristiano señaló que estos resultados dejan de manifiesto que están quedando atrás las tendencias que históricamente han dividido al partido, "se está dejando de lado una forma de hacer política que nos había hecho mucho daño", sostuvo.
Sin embargo, precisó que en su calidad de presidente nacional a todos los que se expresaron a través de sus votos, incluidos aquellos que manifestaron una posición o un matiz diferente al de la directiva. Con lo que se inicia una etapa de "reencuentro, unidad, de convergencia".
Para el colorín este triunfo no sólo favorece al partido, sino también a la política chilena porque la DC es un partido que tiene una "gran responsabilidad" en la política nacional, pues juega un rol muy importante en la coalición de gobierno.
Asimismo, hizo un mea culpa, reconociendo que la colectividad que encabeza se dejó ocupar un espacio importante en el centro político que en adelante comenzará a recuperar.
No obstante, negó que la cohesión mostrada por la DC sea en respuesta a los avances de la UDI, por el contrario reconoció que "lo que aquí ocurrió es que es que nosotros dimos muchas facilidades, prácticamente no omitimos de actuar y eso es lo que le dio un espacio a la UDI y a otros para que ocuparan el espacio nuestro. Ahora henos reaccionado y esta reacción va a ir mucho más allá de lo que algunos pudieron pensar al comienzo y no me cabe duda que la Democracia Cristiana no sólo va a detener un proceso negativo, sino que vamos a recuperarnos y vamos a volver a ser la primera fuerza política del país y que en las próximas elecciones municipales eso va a ser así y esto va a traer tremendas consecuencias, no sólo para nosotros, sino también dentro de la Concertación y, por cierto, en el país".
Añadió que concluido este proceso electoral la DC se abocará al proceso de selección de los candidatos a concejales y alcaldes, adelantando que el 30 de septiembre el partido tendrá conformadas sus listas a lo largo de todo el país. Para el colorín en octubre del 2004 la DC deberá enfrentar su "prueba de fuego" y "creo que lo que estamos viviendo ahora se va a reflejar en forma muy abierta y muy sólida".
__________________
Artículos relacionados:
El intenso fin de semana electoral de la Concertación (15 de mayo 2003)
