El presidente del organismo, Ambrosio Rodríguez, indicó que las diferencias entre los militantes se deben solucionar respetando las instancias con que cuenta el partido para ello.
Luego de dos horas de sesión, el Tribunal Supremo de Renovación Nacional cerró ayer el proceso en contra del senador Sergio Romero. El anuncio lo hizo el presidente del organismo, abogado Ambrosio Rodríguez, quien manifestó su esperanza en torno a que el fallo, que sólo se dará a conocer el próximo lunes 7, sirva para que el partido se "apacigüe".
Rodríguez explicó que el fallo quedó en acuerdo y llamó a los dirigentes y parlamentarios a mantener la tranquilidad que "hasta ahora no han tenido", a la espera de conocer la resolución del organismo que encabeza.
Aunque se negó a adelantar el tenor de la resolución, señaló que " éste es un partido que siempre se ha caracterizado por la diversidad, en que el orden está por mantener posiciones distintas, y nosotros esperamos que el fallo ayude a que se reconozca la existencia de un principio ordenado de toma de decisiones y que dentro de ese proceso cada uno tiene la absoluta libertad para hacer los planteamientos que estime pertinentes".
Recalcó, además, la necesidad de mantener las diferencias internas del partido dentro de sus instituciones.
De las palabras del dirigente se podría inferir que el fallo le da la razón al presidente del partido, Sebastián Piñera, por cuanto destaca la validez de los acuerdos asumidos por las instancias partidarias, razón por la cual la directiva de RN decidió pasar al TS a Romero.
En tanto, durante el día de ayer las declaraciones de unos y otros no bajaron de tono. Tanto, que la diputada Carmen Ibáñez calificó de poco confiable a su colega Lily Pérez, lo que provocó la ira de gran parte de la bancada, que incluso se estudió pedir la renuncia de la primera a su cargo de vicepresidenta del partido, lo que finalmente no prosperó.
Por otra parte, la situación interna de la bancada continúa en una verdadera nebulosa. Ello, porque no todos los "disidentes" están dispuestos a seguir hasta las últimas consecuencias y abandonar el partido en la eventualidad de que el Consejo General determine avanzar en una modificación del sistema binominal.
De hecho, el diputado Nicolás Monckeberg, luego de calificar como un "error político histórico" la solicitud de la mesa de realizar una nueva Comisión Política Ampliada, afirmó que junto a otros colegas se la "jugará" por mantener el sistema binominal en el Consejo del 12 de julio.
Asimismo, dijo que lo que corresponde en un partido es que se respeten los acuerdos por lo que "desde ya anuncio que lo que acuerde el Consejo General lo vamos a respetar". En esta postura lo acompañarían siete diputados "disidentes".
Consultado sobre si podría abandonar el partido, Monckeberg dijo que prefería continuar dentro de la colectividad, para seguir luchando por la unidad de la alianza.
Sin embargo, René Manuel García sostuvo que está dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias y recordó que hace un tiempo 15 diputados manifestaron que eran contrarios a las reformas constitucionales y amenazó con que si el presidente del partido no cambia de rumbo, entonces, "se va a quedar sin diputados pero con un gran Consejo General".
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