El tribunal de alzada agregó un amplio listado de diligencias a su resolución. En él aparecen nuevos generales citados a declarar, como también agentes activos de la DINE. Conozca el detalle de todas las personas vinculadas con Berríos y el listado completo de la Unidad Especial.
El ex guardaespaldas de Pinochet, Jaime Torres Gacitúa, procesado como uno de los autores materiales del crimen del químico de la DINA, Eugenio Berríos Sagredo, entregó una «pista clave» al ministro en visita Alejandro Madrid, la que permitió a la Octava Sala de la Corte de Apelaciones llegar a la convicción de que existen elementos para desaforar nuevamente a Augusto Pinochet.
La información fue proporcionada a El Mostrador.cl por una alta fuente policial.
Esta reciente «cuasi confesión» de Torres Gacitúa, comentó la fuente, puede ser el preámbulo de la definitiva entrega de la verdad por parte del ex oficial, ya que la Justicia, desde que fue sometido a proceso a fines del año pasado, le ha negado en repetidas oportunidades el beneficio de la libertad condicional.
La versión entregada por Torres Gacitúa al ministro Madrid comienza cuando el ahora desaforado senador vitalicio aún ostentaba la Comandancia en Jefe del Ejército en 1992. Es así que los días 12 y 13 de noviembre viajó hasta Argentina con el fin de reunirse con su homólogo, el general Martín Balza. El edecán de Pinochet durante esos días, fue el coronel Javier Scinardo, vinculado al Batallón 601 de inteligencia del ejército trasandino.
En la comitiva viajaba el entonces Jefe de de la Dirección de Inteligencia del Ejército (DINE), el general Eugenio Covarrubias, y el propio Torres Gacitúa, más otros suboficiales que aparecen en la resolución de la Corte del pasado viernes 11 de julio.
Mientras Pinochet visitaba Buenos Aires y departía con sus oficiales amigos, Eugenio Berríos estaba escondido en Montevideo. Fue entonces que una sorpresiva orden hizo que fuera trasladado al balneario de Parque del Plata acompañado de funcionarios de la DINE y de la inteligencia militar uruguaya.
Pues bien, Torres Gacitúa dice en su declaración que durante la visita a Argentina, el general Covarrubias le ordenó llamar al cabo de la DINE encargado de cuidar y vigilar a Berríos en Montevideo, porque «Pinochet viajaría pronto a Uruguay».
La orden fue taxativa: «¡Hay que sacarlo de Uruguay!».
Sin embargo, los hechos ocurridos en Uruguay sólo tres días más tarde, es decir el 15 de noviembre, llevaron a los jueces a centrar sus sospechas sobre Pinochet, como presunto «autor inductor» de la muerte del químico.
Caos en la comisaría
«¡Pinochet mandó matarme!¡Pinochet mandó matarme!», dijo Eugenio Berrios al jefe de la policía del balneario de Parqure del Plata de Canelones, Uruguay, cuando ese 15 de noviembre de 1992 había recién logrado escapar de la custodia de sus captores, quienes lo mantenían secuestrado en una de las casas de veraneo de la localidad.
A las pocas horas, un grupo de altos oficiales uruguayos y chilenos, en un vasto operativo militar, lograron arrebatar a Berríos de la custodia policial sin antes olvidarse de vaciar un tintero sobre el libro de partes donde se había estampado la denuncia.
Tres años más tarde, el 13 de abril de 1995, los restos de Eugenio Berrios -su cráneo acribillado por una bala de grueso calibre- fueron encontrados en la playa El Pinar.
Racionalidad de los hechos
El razonamiento jurídico, dijo uno de los miembros de la sala que dictó la resolución, es el siguiente: Si Covarrubias viajó con Pinochet a Argentina y es el primero quien dio la orden a Torres Gacitúa para sacar a Berríos de Montevideo. ¿Pudo Pinochet no haber sabido? ¿De dónde emana la orden en una institución jerárquica como el Ejército, si Covarrubias es el jefe de la DINE?
Entonces, si Berríos es posteriormente asesinado y está acreditado en el expediente que militares chilenos son los que participan en su muerte ¿Quién dio la orden para eliminarlo?
De allí que esta declaración de Torres Gacitúa, sumados a otros elementos que se hayan en el cuaderno reservado que el ministro abrió recientemente, lo hacen estar muy cerca de aclarar definitivamente qué sucedió con el químico.
Hay que recordar que Eugenio Berríos, junto con ser químico de la DINA y haber perfeccionado el mortal gas Sarín, estuvo involucrado en el narcotráfico.
La Unidad Especial de la DINE lo sacó de Chile a fines de 1991 con destino a Uruguay para evitar que prestara declaracion en la indagatoria por el caso Letelier.
Actualmente están sometidos a proceso los generales (R) Hernán Ramírez Rurange y Eugenio Covarrubias (ambos ex directores de la DINE) por los delitos de obstrucción a la justicia. En tanto en calidad de autores del delito de homicidio lo están los mayores (R) Arturo Silva Valdés y al mayor (R) Jaime Torres Gacitúa. Silva Valdés además, lo está por secuestro. Igualmente encasuados está el ex agentes Raúl Lillo Gutiérrez y el comandante (R), Pablo Rodríguez Márquez.
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