Una población que no valora los avances ambientales y que en varios municipios no tienen departamentos ni personal concentrado en el cuidado del medio ambiente son dos problemas que tienen preocupadas a las autoridades de la región. Se pretende palear esta situación con capacitación a municipios y dirigentes sociales.
El escaso conocimiento de los problemas del medio ambiente y el débil desarrollo de unidades dedicadas a este tema en los municipios santiaguinos obligaron a que la Conama RM y el Gobierno Regional impulsaran en las próximas semanas un programa de "Capacitación y desarrollo de sistemas de información ambiental", de un costo de 180 millones de pesos.
La idea es que los municipios agilicen la implementación de departamentos municipales para canalizar información sobre la realidad ambiental local a los vecinos, que la ciudadanía participe en campañas de descontaminación, y que tengan conocimientos a la hora de analizar un proyecto de inversión.
La iniciativa, promovida por la Comisión de Salud y Medio Ambiente del Consejo Regional y coordinada por la Conama RM se prolongará por 11 meses, y plantea que el proyecto se aplique en Quilicura, Pudahuel, Cerro Navia, Lo Prado, Estación Central, Cerrillos, El Bosque, La Pintana, San Ramón, La Granja, Puente Alto y la Florida.
Según detalla el programa, las comunas seleccionadas presentan una gestión ambiental local "embrionaria, ocupando un lugar que está por debajo del rol que se debiera desempeñar". Se consigna también que las organizaciones ciudadanas ambientales son "débiles" o simplemente "inexistentes".
En esa línea, se describe que municipios del sector poniente como Cerro Navia, una de las zonas con mayores índices de contaminación en la capital "no posee ninguna estructura específica en el campo ambiental. Mayoritariamente, los problemas se derivan a la dirección de obras". De Cerrillos, en tanto, se asegura que "no posee organización ambiental ni en el plano municipal ni en el ciudadano". En similar situación están San Ramón y La Granja que no tienen constituidos "órganos municipales ambientales y las organizaciones de base son embrionarias".
Según el documento, El Bosque posee sólo "un pequeño departamento de higiene ambiental», en el que participan «algunas organizaciones ecológicas ciudadanas".
Sin embargo, hay comunas que entrarán en este programa que han avanzado en al materia. Quilicura, Pudahuel, Puente Alto y La Florida cuentan con unidades de medio ambiente, integradas por profesionales en la materia y con el apoyo de organizaciones ciudadanas de base.
Distanciamiento con el Gobierno
Entre las dificultades detectadas está el «fuerte distanciamiento» entre la Conama, como entidad coordinadora nacional del medio ambiente, y los 52 municipios de la capital. También, la escasa institucionalidad de los mismos, una ciudadanía descontenta y crítica en materia ambiental pero poco informada de los avances, y programas poco coherentes de educación no formal de los habitantes.
Según el director de la Comisión Nacional del Medio ambiente de la Región Metropolitana, Pablo Badenier estos problemas se evidencian cuando la comunidad efectúa reclamos por un proyecto de inversión (un relleno sanitario, por ejemplo) y sólo ven los aspectos negativos y no los beneficios que trae.
Además, explicó que se ha detectado que en las comunas rurales existe una menor institucionalidad en los municipios, pese a que en muchas de esas zonas se emplazan proyectos de alto impacto ambiental.
"En una primera etapa, vamos a implementar un plan piloto de capacitación en las comunas del sector poniente para conocer cuáles son las necesidades de la comunas: qué quieren saber, cómo denunciar e informarse de los procesos de participación ciudadana. Esto se profundizará en un próximo proyecto en los sectores rurales", explicó.
En esa línea, la autoridad ya está realizando capacitación a miembros de los consejos económicos y sociales comunales en la universidad Academia de Humanismo Cristiano, con el fin que conozcan cómo ser parte de los procesos de participación ciudadana durante los estudios de impacto ambiental de los proyectos.
El programa aprobado por el gobierno regional tendrá tres tipos de componentes: capacitación, apoyo a la gestión y articulación de actores involucrados.
En este proyecto, que también cuenta con el apoyo económico de programa de medio ambiente de las Naciones Unidas, se intentará «sensibilizar» sobre la problemática ambiental al personal de los municipios y a los líderes ciudadanos que participen en las discusiones ambientales.
Los seminarios serán complementados con material didáctico que promueva la educación ambiental.
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