Si bien la expectativa provocada por el dirigente, desde que trascendió que preparaba un libro, termina con la presentación de »Testimonio de mi fe», a partir del lunes 15 se inicia, sin duda, la polémica que podría producir su contenido. Esto pese a que su editora lo califica como »reconcialiador» y asegura que en él no se descalifica a nadie.
Alrededor de las 08:30 de la mañana del viernes 12 "Mi testimonio de fe", el libro del presidente de la UDI, Pablo Longueira, que ha generado tanta expectativa en el mundo político y que incluso ha sido objeto de toda clase de ironías, entraba a impresión. Así concluyó casi un mes y medio de intenso trabajo, en que el máximo dirigente gremialista se dividió entre su apretada agenda y el tiempo que se tomó para avanzar en la redacción del texto de 340 páginas, que presentará el próximo lunes en la Casona de Las Condes.
Según relató la periodista Ana Victoria Durruty, encargada de la edición del libro, en la que debía avanzar semana a semana a medida que Longueira le iba entregando los borradores, el titular de la UDI "escribió a mano en un block prepicado y con portaminas".
Durruty indicó que el texto les tomó unos 40 días de trabajo intenso, durante el cual ella y el timonel gremialista se contactaban por teléfono y se reunían "en un lugar especial que se habilitó" para trabajar en la redacción.
Durruty se mostró conforme con la labor realizada y el resultado de la misma. De hecho, explicó a El Mostrador que "es un libro súper entretenido, porque combina documentos sobre diferentes temas que se abordan en él y la espontaneidad de Pablo para contarlo todo".
A pesar de las extensas jornadas de trabajo que debió afrontar, la editora aseguró que no fue difícil relacionarse con Longueira -a quien conoce hace más de 20 años- durante el período de redacción, ya que el dirigente opositor "sabe delegar súper bien y confía en quien está realizando la pega". Asimismo, precisó que fue "muy agradable trabajar con él, porque tiene un muy buen sentido del humor", lo que alivianaba la tarea, por si agotadora, por el escaso tiempo en que se debía concluir.
No obstante, a pesar de la premura, a la editora no le quedó otra que adecuarse a los "múltiples compromisos" del autor, debiendo ajustar horarios y días a la disponibilidad de Pablo Longueira, a quien describió como una persona "flexible y receptiva a las buenas ideas".
Ana Victoria Durruty contó que el sábado 6 de diciembre trabajó junto a Longueira 13 horas continuas, durante las cuales se le hizo la revisión final al libro. En la ocasión se les sumó, como en otras oportunidades -dijo-, la esposa del dirigente, quien resultó ser un importante apoyo durante la redacción del texto. Tanto, que "lo revisó completo" cuando finalmente se terminó de escribir, lo que fue un verdadero mérito porque el dirigente "siempre está agregando" nuevas ideas al borrador.
Luego de esa jornada una serie de personalidades cercanas al titular de la UDI tuvieron acceso al borrador. Según Durruty la idea era escuchar opiniones y aceptar sugerencias. A quienes tuvieron esa tarea se les envió el texto el domingo 7, por lo que hasta el lunes 8 por la noche se oyeron las observaciones ad hoc. Entre quienes leyeron "Mi testimonio de fe" en esa etapa figuran los senadores Andrés Chadwick y Juan Antonio Coloma, un sacerdote cercano a Longueira, Juan de Dios Vial Larraín -quien además escribió el prólogo del libro- y Cristián Larroulet.
Aunque después de eso parecía que la redacción estaba terminada, no era así, ya que en la madrugada del jueves recién pasado, el autor le avisó a la editora que acababa de terminar de escribir el epílogo, que hasta ese momento no estaba contemplado. Sin embargo, Durruty aseguró que eso fue positivo porque en el epílogo Longueira "redondeó todo" el contenido.
La editora confidenció, además, que la solapa del libro contiene una foto de Pablo Longueira con su señora. También indicó que el volumen consta de una serie de documentos que respaldan algunos de los relatos del dirigente. Uno de ellos, por ejemplo, se refiere a Santo Tomás Moro -patrono de gobernantes y políticos-, por quien el titular gremialista siente gran admiración, la que explica en su obra de 340 páginas, dos partes, nueve capítulos, reflexiones finales y el epílogo.
"Testimonio de mi fe" contiene también una serie de relatos de los senadores Juan Antonio Coloma y Andrés Chadwick y del alcalde de Santiago, Joaquín Lavín, donde rememoran al fundador de la Unión Demócrata Independiente, Jaime Guzmán, cuentan cómo era y por qué para ellos constituye un modelo a seguir. El prólogo fue escrito por el ex rector de la Universidad de Chile, Juan de Dios Vial Larraín, quien además lo presentará en la Casona de Las Condes el próximo lunes. Evento para el cual se han cursado unas dos mil invitaciones.
La obra está dedicada a Jaime Guzmán, Miguel Kast, a su señora, hijos y padres, a la UDI y a los simpatizantes de la colectividad, pero también a los que no lo son «para que juntos recorramos caminos de unidad».
