Publicidad

Baja reprogramación en regiones obliga a recortes en universidades

Que sólo el 31 por ciento de los morosos tenga hoy al día el crédito universitario fue recibido como un golpe bajo por las casas de estudio que esperaban recursos para invertir en distintas áreas. Ahora, algunos planteles recortarán en compra de libros o mejoramiento de infraestructura. Beneficios sociales para los estudiantes no se afectarán.


Trece de las 25 universidades que pertenecen al Consejo de Rectores obtuvieron recursos muy por debajo de los que esperaban por concepto de reprogramación de deudas. A nivel nacional la repactación de créditos llegó a un 31 por ciento, lo que implica que 18 mil millones de pesos llegarán a las arcas estudiantiles.



La situación de las universidades tradicionales regionales es la que más complicó en la evaluación de las reprogramaciones. Casas de estudios superiores que ya cuentan con bajo presupuesto no pudieron con la meta de lograr, al menos, que la mitad de los alumnos se comprometieran al pago. Por eso, los dineros para hacer frente a demandas que se pretendían costear con la repactación deberán salir de otros ítemes.



El problema más grave se dio en las universidades de Playa Ancha, con un 16 por ciento de alumnos que reprogramaron; Católica de Temuco, con un 17, 3 por ciento; la de Valparaíso, con un 18 por ciento; de la Santísima Concepción, con un 24 por ciento; y Arturo Prat, con un 25 por ciento.



El problema surge porque son planteles de regiones, con menor número de alumnos matriculados -y en general de bajos ingresos-, y menor infraestructura. Con menos dinero derivado de la falta de reprogramación, hay menos recursos frescos para invertir en beneficios que se tenía pensado entregar.



Entre los ex estudiantes que cumplieron con sus deudas más masivamente, están los de la Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE), cuyos egresados se desempeñan como profesores. Ellos cumplieron con los créditos en el 49 por ciento de los casos.



En contraposición, sólo el 21 por ciento de los deudores de la Universidad Federico Santa María, institución de la que egresan profesionales de carreras de altos ingresos, reprogramó sus créditos.



Respecto a los profesionales que anteriormente se habían manifestado a través de internet con la voluntad de repactar la duda, el 60 por ciento de ellos concretaron la reprogramación y se acercaron a las universidades, cancelaron el cinco por ciento y firmaron el pagaré correspondiente.



Meta a universidades



En el Mineduc se explicó que la gran cantidad de impagos se debe a que las universidades no tienen una buena gestión para hacer efectiva la cobranza. La idea más reciente es imponer una meta al Consejo de Rectores, señalándole que el 2004 se debe pagar al menos el cinco por ciento del total de las deudas de sus ex estudiantes, que asciende a unos 750 mil millones de pesos.



El Mineduc junto con la presidenta de la Comisión de Educación de la Cámara, Carolina Tohá, buscan que se amplíe el sistema de descuento por planillas de pago que hoy realizan algunas universidades para que los recursos lleguen de manera inmediata.



Los recursos que entrarán a las casas de estudio son útiles para beneficios estudiantiles, infraestructura, investigación y equipamiento. Además, los dineros debieran ser reinvertidos en la asignación de nuevos créditos, aunque las instituciones poseen autonomía para destinarlos a los ítemes que deseen.



En busca de activos, los planteles subieron los aranceles en las distintas carreras para los alumnos nuevos y antiguos entre un 3 y un 10 por ciento, lo que generó el inmediato rechazo de las federaciones estudiantiles.



Recorte a libros



Entre los casos complicados derivados del no pago de los deudores está el de la Universidad Arturo Prat de Iquique. La reprogramación de los ex alumnos alcanzó sólo el 25 por ciento, lo que se suma al hecho de que la casa de estudios es una de las que trabaja con menores recursos, 20 mil millones al año.



El jefe de gabinete de la rectoría, Juan Torres, explicó que la falta de estos dineros los tiene "desmoralizados, pues vemos que hay una gran falta de solidaridad de los estudiantes. Esto afectará áreas importantes de la universidad, como la compra de material bibliográfico o el mejoramiento de la infraestructura", explicó.



En cuanto a los beneficios sociales como alimentación o de salud para los estudiantes, dijo que ello "no se verá afectado". El plan es apretarse "el cinturón en otros ítemes".



Torres aseguró que uno de los factores que influye en que los estudiantes no paguen es que muchos de los deudores aun no tienen trabajo, por lo que les ha sido imposible repactar.



Nuevo sistema para becas



El Mineduc también anunció que se reformularán las becas y créditos universitarios para el 2004. Se estableció que para las seis becas se debe tener un puntaje mínimo de 600 puntos y para el fondo solidario 475 puntos en la Prueba de Selección Universitaria (PSU), 25 más que el año anterior.



Las becas se focalizarán en personas que forman parte del 40 por ciento más pobre de Chile, lo que significa que el ingreso per cápita mensual del hogar del alumno no supere los 60 mil pesos.



Ahora quien asignará todas las becas será el ministerio y no las universidades, como era hasta el 2003, pues se creó un Fondo de Becas que centralizará los beneficios. Por eso, la jefa de la división de Educación Superior, Pilar Armanet, explicó que los alumnos deben llenar el Formulario Único de Acreditación Socioeconómica (FUAS) puesto en Internet (www.fuas.cl) para postular tanto a becas como a crédito.



De los seis tipos de becas que entrega el Gobierno para los universitarios, a partir de este año sólo dos no necesitarán acreditar puntaje: la beca Nuevo Milenio (destinadas a carreras técnicas) y las becas de mantención (para gastos asociados a las carreras).



Sin embargo las otras cuatro tipos de becas requieren puntaje y en tres de ellas, además, se pide promedio de notas de enseñanza media superior de entre 5,5 y 6.0.



Este año el Gobierno dispuso de casi 30 mil millones de pesos para becas. De ellos, 13 mil se asignarán a la beca Bicentenario. Precisamente este beneficio fue el que sufrió el mayor cambio, ya que antes no tenía requisito académico.



____________


Publicidad

Tendencias