Tras una convulsionada sesión, los diputados UDI y RN dejaron en estado de coma el proyecto de royalty, luego que la Concertación no lograra obtener el quórum necesario para aprobar el artículo central de la iniciativa (61 de los 66 votos), situación que a juicio de varios parlamentarios transformará la «regalía» en uno de los temas de campaña para el 2005.
Si bien el proyecto de royalty pasó al Senado a duras penas, el artículo primero del proyecto o «espíritu de la ley» fue rechazado, luego que la derecha en su conjunto se abstuviera y la Concertación no alcanzara los 66 votos necesario, quedando la votación de la siguiente manera: 61 a favor, 41 en contra y ocho abstenciones.
Situación que dejó en el «suelo» el proyecto del Ejecutivo, que a pesar de los pronósticos logró «sobrevivir» dejando en «estado de coma» el cobro de 3% para la minería metálica y 1% para la minería no metálica.
Acción que dice relación con la aprobación de la idea de legislar a partir del resto del articulado (del 5 al 7), que sólo necesitaba mayoría simple. Una decisión legislativa que para varios diputados oficialistas no es más que el resultado de una derecha que «no está pensando en Chile», sino que en las «transnacionales». Sector que para otros parlamentarios -más agudos en sus críticas- tendrá que enfrentar la condena pública en medio de las elecciones municipales y presidenciales de 2005.
El debate
Al respecto, el diputado informante Camilo Escalona valoró el trabajo de las comisiones unidas y rescató el propósito de la iniciativa, que permitirá mejorar la vida en regiones.
Por su parte, el UDI Alejandro García-Huidobro señaló que «si -el gobierno- quiere más recursos para innovación tecnológica, que analice a Codelco. Las asesorías se han triplicado». Asimismo, cuestionó la «suma urgencia» puesta por La Moneda, que calificó como «irresponsable».
En tanto, en defensa del royalty, el secretario general de la DC, Jaime Mulet, indicó que la «historia ha cambiado: no tengo cara para oponerme a una iniciativa que beneficiará a todos los chilenos».
«Hoy día decir no al royalty es decir no a la Región de Antofagasta, decir no a la de Atacama. Que asuman su responsabilidad; el pueblo lo sabrá», sentenció el parlamentario.
En esa línea, el diputado RN Carlos Vilches, manifestó que «nadie discute que las empresas han generado empleo, pero finalmente, la verdad es que toda la empresas nunca han pagado un sólo pesos de impuesto al país».
De igual modo, el diputado PPD, Eugenio Tuma, aclaró que «el sueldo de Chile debe ser una preocupación de todos los chilenos».
Asimismo, el diputado Saffirio emplazó directamente a la UDI a dejar de defender los intereses transnacionales. Palabras que sacaron aplausos.
En tanto, contrarrestando las palabras de los parlamentarios concertacionistas, el diputado UDI Dario Molina, expresó que la «iniciativa generará tanto desempleo como la ley laboral».
Por su parte, el diputado Leay cuestionando la inteligencia de Camilo Escalona, defendió la propuesta de Lavín y señaló que al «diputado le faltó leer todo el proyecto».
Acción que obligó la intervención del oficialismo, que a través del diputado Leal emplazó a la derecha a no buscar subterfugios y asumir que defienden a las grandes mineras como lo hace Lavín, «quien llegó tardíamente al debate sobre el royalty».
Finalmente, el Ministro de Hacienda, respondiendo el emplazamiento del diputado Lorenzini, se comprometió a retirar la urgencia siempre y cuando se aprobara en general el proyecto de royalty.
Del mismo modo, echó la culpa de la politización de la iniciativa a las grandes mineras, que a su juicio no le interesa que Chile tenga innovación tecnológica.
Contradicción entre Lorenzini y Dockendorff
Mientras el presidente de la Cámara de Diputados, Pablo Lorenzini, señaló que el polémico proyecto sería visto hasta su total despacho en la sesión especial, el ministro Dockendorff aclaró que luego de su eventual aprobación en general se retiraría la suma urgencia, dando paso a una nueva discusión en las comisiones unidas de Minería y Hacienda.
«El gobierno va a mantener el ritmo legislativo fijado hasta ahora, manteniéndole la urgencia, pero escuchando atentamente las opiniones que van a manifestar los diputados, evaluando los pasos a seguir», dijo el ministro Segpres.
Continuando, confesó que han realizado reuniones virtuales con el comité político y han acordado seguir con la idea de que se pruebe en general y que en su mérito se converse.
Por su parte, Lorenzini aclaró que «no se pode postergar la discusión, porque en algún minuto los parlamentarios, representando a la gente, tienen que expresarse. No sacamos nada con evadir el tema y tomar cada vez más tiempo. En el ejercicio democrático cada uno dará la explicación al país».
La propuesta de Vilches
Ayer, los ministros Nicolás Eyzaguirre (Hacienda), Francisco Vidal (Gobierno) y Eduardo Dockendorff (Presidencia) se trasladaron a Valparaíso en busca de votos para aprobar el proyecto en general.
Pero tras diversas reuniones y un almuerzo con la bancada de diputados RN -en el que éstos condicionaron el apoyo a la iniciativa a postergar la votación en sala-, el Ejecutivo quedó a la deriva.
Con todo, La Moneda siguió negociando y cerca de las 15:49 horas los ministros políticos conversaron nuevamente en la cafetería de la Cámara, pero el resultado no varió: los votos de RN hasta ese momento confirmados, sumados a los de la Concertación, no alcanzaban el quórum.
Luego, a las 16 horas, el diputado RN, Carlos Vilches, lanzó otra vez su plan para salvar el royalty. No obstante, las aguas estaban agitadas, y la idea de retirar la suma urgencia al proyecto de royalty fracasó.
La ofensiva del oficialismo antes de la votación
Al respecto, el Ministro de Hacienda habló de la propuesta de Lavín y señaló que es «parecida» a la del gobierno, por lo que espera «consecuencia».
«El país necesita saber si el Congreso pleno está disponible para legislar sobre el derecho que nos asiste a cobrar por nuestra riquezas básicas», añadió Eyzaguirre.
Continuando, el Ministro señaló que «quienes siempre se han opuesto a los impuestos, que le digan al país cómo van a mejorar la potencialidad de Chile al futuro y la distribución del ingreso».
Por su parte, el presidente de la Comisión de Hacienda, Camilo Escalona, definió la propuesta de Lavín como una estafa, puesto que «pretende esconder un rechazo con disimulo, o sea, recurriendo a un artificio con el objeto de ocultar cuál es su verdadera posición de rechazo al royalty».
«En consecuencia, nosotros consideramos que su motivación es una acción desesperada, tendiente a salir del mal paso en que se encuentra ante una propuesta legislativa que tiene mayoría en la sociedad chilena y que sus parlamentarios quieren rechazar» agregó el diputado PS.
En el mismo sentido, el diputado DC Excequiel Silva, indicó que «ellos están actuando con astucia, con el objetivo de ocultar de alguna manera su rechazo al royalty, propuesta que significa menor recaudación, vinculándolo a la educación superior».
Finalmente, el parlamentario DC, Eduardo Saffiro, hizo un llamado a la derecha a definir su posición, vale decir, decidir «entre servir a los intereses generales del país o a Don dinero».
