En la Alianza por Chile coinciden que la avanzada del sector hacia materias que le son primordiales, como la seguridad ciudadana y -ahora último- el royalty no son casuales. Son, aclaran, parte de una estrategia que apunta a demostrar que la derecha cuenta con los equipos y las »ideas» para gobernar »mejor que la Concertación».
La reacción del líder opositor, Joaquín Lavín, ante las permanentes disputas internas de la Alianza por Chile resultó ser la necesaria intervención para provocar un cambio que le facilitara demostrar al electorado que la derecha sí es capaz de gobernar Chile. Un ejemplo de ello lo constituyen los proyectos alternativos del candidato, tanto en materia de seguridad ciudadana como en la búsqueda de una iniciativa distinta del royalty promovida por el Gobierno, surgidas cuando el conglomerado recobró la calma. A lo que se suma el reciente debate por el feriado de Fiestas Patrias.
Aunque en la derecha evitan el término cogobierno para definir la actitud asumida por Lavín, reconocen la existencia de una "estrategia" destinada a demostrar, con hechos concretos, que el candidato está preparado para gobernar "mejor" que como lo han hecho hasta ahora los gobiernos de la Concertación. De allí que los proyectos presentados en su nombre por los parlamentarios de la Alianza, no constituyan -según cercanos al edil- meros voladores de luces.
Propuestas "serias"
Por el contrario, aclaran, los documentos presentados fueron realizados en base a estudios serios y no sólo como una reacción de último minuto. En tanto, los temas abordados no son una preocupación nueva para la derecha, como es el caso puntual de la iniciativa denominada "la tercera es la vencida" -insisten-, sino aquellos sobre los cuales el sector siempre ha manifestado una especial preocupación y que apuntan a materias de Estado.
Si bien esperarían que el Gobierno acogiera las propuestas, lo que significaría un punto a favor de Lavín, admiten que al momento de presentarlas estaban preparados para recibir una negativa de parte de la autoridad, que a juicio de la oposición no estaría dispuesta a darle ni la más mínima ventaja al candidato de la Alianza. Eso es lo que habría ocurrido en el caso concreto de la iniciativa que se opone al royalty, dicen voces de la derecha, convencidas de que su propuesta es "mucho mejor" a la presentada por La Moneda.
Las iniciativas surgidas desde los equipos de Joaquín Lavín cumplen con el objetivo de "no oponerse por oponerse", plantea un dirigente de la Alianza, quien además asegura que el trabajo realizado en materia de proyectos apunta a "proponer siempre algo nuevo y mejor" a lo sugerido por los parlamentarios oficialistas o, en su efecto, por el Gobierno. Todo, dentro de una "estrategia comunicacional bien preparada", asegura.
Colaborar no es cogobernar
Este dirigente de la oposición precisa que, en el marco de la mencionada estrategia, la idea es resaltar que "la derecha puede gobernar y hacerlo bien", y que asimismo , "puede ser un aporte constructivo aun antes de ser gobierno".
No obstante, manifiesta que eso no significa cogobernar con la Concertación, ya que la obligación del Gobierno es solucionar los problemas de la ciudadanía. La idea de la Alianza es -dice- intentar contribuir a ello, pero no asumir los costos de los fracasos, para eso -enfatiza- están las autoridades.
Así las cosas, añade la fuente, no sería raro que surgieran nuevas iniciativas promovidas por los equipos de Lavín, siempre en el contexto -dice- de aportar en materias de Estado.
Por otra parte, cercanos al candidato estiman que para él es importante que la ciudadanía se dé cuenta que puede contribuir de manera real a la solución de algunos problemas que, en la derecha estiman, no han sido corregidos por éste y los gobiernos de la Concertación que lo han precedido.
Por lo que sus incursiones en el ámbito legislativo no cejarán, por el contrario, dice, insistirá en responder a las iniciativas gubernamentales que la oposición considere nefastas para el futuro del país, a pesar de que las autoridades también mantengan su actitud de rechazarlas.
Feriado controvertido
Tal como se han dado las cosas, todo parece indicar que la derecha y Lavín en particular, efectivamente aprovechará cada oportunidad que le dé el Gobierno para ganar el punto. Un claro ejemplo de ello, lo constituye el caso del debatido feriado de Fiestas Patrias. Esto, porque a pesar que La Moneda, al principio, se negó categóricamente a agregar un día festivo al fin de semana del 18 y 19 de septiembre, terminó cediendo.
Así, los trabajadores podrán contar con el viernes 17 para agregarlo a los festejos y mientras ellos celebran este logro, Joaquín Lavín hace lo propio. Si bien no fue el proyecto de la UDI -presentado por el diputado Mario Varela-, respaldado por el edil, el que se aprobó, una vez más se dejó de manifiesto la falta de coordinación entre La Moneda y sus parlamentarios. Ventaja para Lavín.
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