Mientras ayer el diputado y vicepresidente del PPD, Jorge Tarud, almorzaba con el candidato presidencial Fernando Flores para afinar una »estrategia» de apoyo a la DC, Víctor Barrueto intenta apagar las aspiraciones de quienes quieren entregar »hoy mismo» el respaldo a Michelle Bachelet.
Aunque el Presidente Lagos le dijo a sus ministros que no quería más una semana como la pasada, la bajada de Sergio Bitar de la carrera presidencial, generó un efecto que podrá detenerse en el gabinete, pero no en los partidos.
Las aguas quedaron especialmente revueltas en el PPD, donde las distintas posiciones sobre a quién apoyar han generado un fuerte debate entre quienes están por endosar "hoy mismo" su apoyo a Michelle Bachelet -Guido Girardi, entre otros- y quienes sostienen que es necesario dilatar el proceso hasta después de las municipales de octubre y luego discutir si se apoya al Partido Socialista o a la Democracia Cristiana.
Todo esto, en medio del poder que perdiera el presidente del partido, Víctor Barrueto, tras pedir la intervención de los "jefes de tendencia" -Guido Girardi y Francisco Vidal- para que calmaran a sus seguidores descontentos tras la negociación municipal.
Por esto, desde la semana pasada el presidente del PPD se ha reunido con personeros del vidalismo para intentar frenar al girardismo que está por apoyar "aquí y ahora" la proclamación de Michelle Bachelet. La estrategia trazada, hasta ahora, es que cuanto antes Barrueto llame a un plebiscito para noviembre en el cual "democráticamente" el partido decida a quién apoyará.
La idea es que en el plebiscito compitan Michelle Bachelet y Fernando Flores, excluyendo a los candidatos de la Democracia Cristiana, Eduardo Frei y Soledad Alvear.
De esta forma, quienes están por apoyar a Bachelet tendrían que esperar hasta después de las municipales, pues "sería impresentable que los mismos que promueven la participación y las decisiones democráticas se saltaran esta instancia. Además, sería una forma honrosa de bajar a nuestro candidato presidencial".
Anoche, el presidente del PPD iba a cenar con el senador Fernando Flores para hacerle ver la conveniencia de que también bajara su candidatura y advertirle sobre la posibilidad de elegir a quién apoyar en un plebiscito, donde -según los cálculos de los dirigentes de la colectividad- Flores no tendría chance y por lo tanto, sería el mejor argumento para convencerlo de que no siga en carrera. La cita, sin embargo, fue cancelada a última hora.
Pese a esto, hoy Flores sostendrá un encuentro con dirigentes del PPD que le dan su apoyo, donde le insistirán que siga en carrera.
Coqueteo con la DC
Mientras la preocupación de Barrueto está en detener un apoyo inmediato de su tienda a Michelle Bachelet, ayer el vicepresidente del PPD, Jorge Tarud, se reunió a almorzar con Fernando Flores.
La cita se realizó en un restaurante de Viña del Mar, a las 14.30 horas, y en el encuentro "bilateral" se conversó sobre la conveniencia de conseguir los respaldos para apoyar al candidato de la Democracia Cristiana y no a Bachelet.
De hecho, el primer paso lo dio el propio senador Fernando Flores, al "agruparse" con Eduardo Frei para discutir los temas de futuro.
La estrategia de apoyo a la Democracia Cristiana se centra en que "el partido debe ser racional para crecer con más diputados y senadores». Esto porque la lectura que hacen es que el PPD podría hacer una buena negociación parlamentaria con la DC si le da su apoyo, tal como sucedió en las municipales, donde obtuvieron lo que deseaban sin el apoyo del PS.
«No tendremos presidente PPD, pero al final decidiremos quién será el candidato de la Concertación», asegura una fuente que tuvo conocimiento del encuentro y quien afirmó que la idea es reforzar los lazos con la DC, pues "hasta ahora todos los acuerdos que hemos hecho con los socialistas han sido traicionados por los mismos socialistas".
Además, aseguran en el PPD, "por ahora la única forma que tenemos de crecer es en parlamentarios. Si condicionamos el apoyo a la DC podríamos obtener más beneficios que si negociamos con el PS sin saber cuál será nuestro apoyo electoral en las municipales".
Otro punto para acercar las posiciones hacia la DC, y especialmente a Eduardo Frei, es la desconfianza que generan los "asesores" directos de Bachelet, Carlos Ominami y Camilo Escalona.
"Los asesores de Bachelet no favorecen sus pretensiones. Al contrario nos hacen acercarnos más a la DC», asegura una fuente del PPD, que explica que con Ominami y Escalona a la cabeza de la carrera presidencial de la Concertación se "espantará" a los electores de centro que podría captar la Democracia Cristiana. Votos que serán fundamentales para una elección que se prevé especialmente estrecha.
Otro de los acercamientos que hubo ayer entre el PPD y la DC, fue un encuentro de pasillo -que duró cerca de 20 minutos-, en el Congreso, entre Adolfo Zaldívar y Víctor Barrueto, donde según trascendió se habría discutido el apoyo del progresismo a Bachelet.
"El que apoye a la DC será un traidor"
Mientras se realizaba el almuerzo entre Tarud y Flores y se discutía la conveniencia de apoyar a la DC, quienes están por Bachelet aseguraban que "quien firme por la DC será considerado un traidor y será expulsado del partido".
A diferencia de quienes están por ganar cupos parlamentarios, aseguraban que "el progresismo no permitirá que por unas diputaciones más el bloque termine con su tradición de izquierda".
De hecho, esta visión es tan categórica que se llegó a hablar de una división de la colectividad si es que esto sucedía.
En esto se funda, sostienen, la premura por apoyar ahora a Bachelet, pues si "el partido no llega pronto a un acuerdo, inevitablemente se dividirá".
