A su regreso, previsto para el próximo martes, el magistrado se reunirá con los tres expertos a cargo de las pericias para que éstos generen un acuerdo sobre el estado de salud de Augusto Pinochet. En caso contrario, podría convocar a otros especialistas para dirimir esta materia.
El ministro de fuero Juan Guzmán Tapia viajó a Estados Unidos y dejó en suspenso, al menos hasta el próximo martes 12 de octubre, la resolución sobre los peritajes neurológicos y físicos que se le practicaron al general en retiro Augusto Pinochet Ugarte, en el marco del caso Operación Cóndor y que son determinantes para establecer la posibilidad de su procesamiento por estos hechos.
El magistrado viajó a Las Vegas, invitado por un instituto vinculado a la defensa de los derechos humanos, a dictar una charla.
La ausencia del ministro fue confirmada a El Mostrador.cl por fuentes de la Corte de Apelaciones de Santiago, que señalaron que pidió permiso por hoy, jueves, y mañana, viernes.
Luego viene el fin de semana largo, por lo que el juez, cuya subrogante legal es la ministra Gabriela Pérez, retomará sus funciones recién el martes.
Pinochet está «lúcido»
En Chile, por lo pronto, dos de los tres peritos deben entregar mañana su informe final. A saber, el designado por el tribunal, Jorge Tapia Illanes, y el de los querellantes, Martín Cordero, ya que el de la defensa del ex militar, Sergio Ferrer, lo presentó el lunes.
Antecedentes obtenidos por este diario indican que el perito de los querellantes ya tiene formada una opinión sobre el estado de salud de Pinochet.
Ésta sería, en términos generales, que el ex militar enfrenta problemas de carácter físico propios de su avanzada edad. Sin embargo, en cuanto a su lucidez, sólo tendría problemas con su memoria de corta duración, también debido a sus 88 años, pero su memoria de largo plazo estaría en buen estado.
Esto implica, para los intereses de los abogados recurrentes en esta causa, que Pinochet diferencia entre el bien y el mal respecto de la conducta que tuvo como comandante en jefe del Ejército y, finalmente, como el mandamás de la Operación Cóndor en su capítulo chileno. En otras palabras, según los querellantes, se le podría iniciar el juicio de reproche, por lo que Guzmán debiera encausarlo como autor de esos ilícitos, tal como lo han solicitado.
En tanto, el informe restante, de Jorge Tapia, el perito designado por Guzmán, sostendría, de acuerdo a fuentes consultadas por este diario, que si bien Pinochet está lúcido, sus condiciones de salud general podrían no ser recomendables para su comparecencia en un juicio. Sin embargo, esta versión no pudo ser confirmada oficialmente.
Conclusión común
Con todo, más allá de los informes que cada experto le debe entregar al ministro, éste último se reunirá el martes con los tres especialistas para que alcancen un acuerdo y, sobre esa base, generar una conclusión común.
Al contrario, si no hubiese consenso entre los facultativos, Guzmán tiene preparada ya citaciones a otros peritos, para poder contrastar opiniones.
Un informe médico no es vinculante para las decisiones de un juez en esta materia, sino sólo una guía para resolver.
Este razonamiento tiene sentido, debido a que Pinochet fue sobreseído en 2001, en el caso Caravana de la Muerte, atendiendo a que surgió un hecho después de los ilícitos que le fueron imputados -la demencia subcortical de leve a moderada que decretaron los especialistas designados en aquel tiempo por el mismo Guzmán-, pero no se trató de demencia tal como lo establece la ley en el Código de Procedimiento Penal, en los artículos referidos al sobreseimiento.
En cualquier caso, la decisión del magistrado sólo será conocida una vez que regrese de su viaje que, sin duda, dejó sorprendidos tanto a querellantes como a defensores debido al especial momento en que éste se efectuó.
______________________
Vea lo último sobre la Operación Cóndor
Vea lo último sobre el caso Pinochet
