A los tres -Danae Mlynarz, Rodrigo Peñailillo y Marcelo Belmar- los tomó por sorpresa la llamada de la abanderada PS-PPD, pero están felices de integrar su comando. Una trabajadora social y cientista política, un ingeniero comercial y un contador auditor tendrán la dura tarea de organizar la agenda de la presidenciable.
Tienen en promedio 34 años de edad y trabajan directamente con la abanderada presidencial del bloque PS-PPD, Michelle Bachelet. Ella fue quien los llamó telefónicamente a cada uno, a su turno, para pedirles que trabajasen en su campaña presidencial y, obviamente, los tres dijeron que sí.
Se trata de Danae Mlynarz, 31 años, trabajadora social y cientista política de la UC, actual concejala socialista de Ñuñoa; Marcelo Belmar, 41 años, contador auditor, que se encuentra en el último año de ingeniería comercial en la Uniacc, y el ex gobernador de Arauco Rodrigo Peñailillo, de 31 años, ingeniero comercial de la universidad del Bío Bío. Los dos últimos pertenecen al Partido Por la Democracia (PPD).
Los tres «chicos superpoderosos» conforman el comité ejecutivo de Michelle Bachelet. Y han tenido bastante trabajo hasta ahora, según ellos mismos confiesan, ya que hay muchas peticiones de audiencia con la candidata. Y ellos son los encargados de hacer los contactos, llevar la agenda de la candidata -tarea no menor- y organizar cómo será esta campaña presidencial que recién comienza.
A los tres les sorprendió la llamada de Michelle Bachelet. La propia Danae Mlynarz cuenta que conoció a quien hoy es su "jefa» el día antes que ella dejara el Ministerio de Defensa (29 de septiembre, justo el día de su cumpleaños), cuando fue a pedirle su apoyo para los candidatos jóvenes en la campaña municipal. "No éramos amigas de antes y ahora trabajamos juntas. Es súper buena onda», expresó riendo la joven.
"Me llamó y nos juntamos en su casa donde me contó que tenía que hacerme cargo de toda la parte operativa y cómo le iba a decir que no. No lo pensé mucho e inmediatamente acepté», comentó Danae mientras enciende un cigarrillo en la oficina del segundo piso de la «casita blanca» de Antonia Bellet que comparte con Belmar.
Hasta antes de llegar a la sede del comando en Providenica Danae se desempeñaba como jefa del área de estudios del Serplac Metropolitana. Allí está hace un año y medio y ahora se encuentra con un permiso sin goce de sueldo por tres meses. La única mujer del comité ejecutivo trabajó también en FLACSO y en la Fundación Chile 21, es soltera, pero dentro de sus planes está casarse con su pololo que es ingeniero. Le gusta el cine y leer.
Hace cinco años es militante socialista, igual que su padre Enrique. Tiene dos hermanos menores que ella: Iván, de 30 años, quien fue el segundo presidente comunista de la FECH tras el retorno a la democracia y ahora está en el Foro Social, y Matías, estudiante del último año de arquitectura de la Universidad de Chile. Danae sólo tiene una sobrina de seis meses que se llama Laura, hija de su hermano del medio. "Ella es preciosa», dice chocheando.
Candidata a última hora
Ñuñoína, Danae fue candidata a "última hora" del Partido Socialista de esa comuna en los comicios pasados. "No fue algo planificado, ni pensado. El día antes de que el PS debía nombrar a sus postulantes, Natacha Molina, era la nominada, pero se cambió de trabajo y se arrepintió horas antes de cerrar la plantilla. Un grupo de mujeres del comunal del partido me pidió ocupar el lugar …. Yo no lo tenía en mis planes, estoy estudiando, no me cabe y al final lo pensé y decidí aceptar me la jugué. El Comité Central aceptó», dijo.
Entonces, pidió sus vacaciones, hizo tres semanas de campaña y a pie recorrió toda la comuna. "Te puedo decir que conocí todo Ñuñoa, pese a que siempre he vivido en la comuna. Me fue súper bien en la campaña y saqué segunda mayoría».
La propia Danae reconoce que no tiene mucha experiencia electoral fuera del trabajo en su campaña y en el puerta a puerta de Lagos, en las presidenciales de 1999, pero "he aprendido mucho hasta el momento en este trabajo».
El más experimentado
El "más viejo" del grupo y con más experiencia en el tema electoral es Marcelo Belmar, del PPD. Estuvo a cargo de la reciente campaña municipal de su partido, en las parlamentarias del 93 y 97, organizó las primarias de 1999, es miembro de la dirección de la colectividad y tesorero de la misma, fue dirigente juvenil y trabajó en los gobiernos de Aylwin y Frei.
Es el que más sabe de campañas. Entiende de recursos, logística y las prácticas de una campaña, pero reconoce que ésta será distinta, más que nada por la naturaleza del liderazgo que tiene Michelle, que "es menos convencional, por lo tanto es un desafío mayor, atractivo y complejo ya que se debe canalizar el aporte de la gente que es nueva, independiente y que quiere vincularse de otra manera».
Para Belmar, "el liderazgo de Michelle es una oportunidad y un desafío para la política ya que la sociedad le está diciendo algo a los políticos de la Concertación al elegirla a ella. La política ha cambiado».
Al igual que su compañera de oficina, conoció a Michelle Bachelet durante la campaña cuando sacaron algunas fotografías y grabaron unos spots. "Conversé con ella cuando vino a conocer esta casa, que estaba arrendada por el PPD. Yo le había declarado que estaba dispuesto a trabajar en su campaña y como ella me lo planteó…», ahí está.
Marcelo Belmar está casado en terceras nupcias, tiene dos hijos de 10 y 7 años del segundo matrimonio y vive con su actual esposa sicóloga y su hija. "Veo a mis hijos y soy un padre moderno», dice este aficionado a la lectura, sobre todo de los diarios y de la buena literatura. Es hincha de la "U" y se declara un buen conversador.
Pero no todo ha sido política en su vida ya que también incursionó en el mundo de la gastronomía y junto a un socio instaló hace unos años el restaurant "Siciliano" en Bellavista, aunque ya no es parte de ese negocio. Tuvo agencia de publicidad y hoy trabaja con una consultora de medio ambiente y energía.
El más reservado
No es tan locuaz como sus colegas. Rodrigo Peñailillo, como buen ingeniero comercial es más callado. Viene de Arauco donde se transformó en el gobernador más joven del país hasta que en enero dejó su cargo para venir a trabajar a tiempo completo con la abanderada PS-PPD.
"A Michelle la conocí en Curanilahue en la campaña municipal, pero de allí no hablé con ella hasta que me llamó hace poco. Ella ha dicho que quiere una combinación de gente nueva, joven, con experiencia», señaló el ex gobernador.
El propio Peñailillo destacó que "el trabajo con la ex titular de Defensa ha sido intenso. Ella tiene mucha dinámica, tiene las ideas bien claras y le gusta que las cosas se hagan rápido», comentó este ingeniero soltero que está pololeando con alguien a quien prefiere no mencionar, aunque no tiene -aclara- intenciones de casarse. Al menos por el momento.
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