Las juventudes concertacionistas consideran que para generar mayores oportunidades, primero se debe redefinir el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv). Pero el presidente de Nuevas Generaciones (UDI), Pablo Desbordes, dice que la solución es eliminar tanta burocracia y que no es necesaria la existencia de dicha organización.
Muchos jóvenes han logrado concretar sus proyectos a través de fondos concursables o de la autogestión que logran gracias a sus esfuerzos y conocimientos. Sin embargo, hay quienes todavía realizan sus shows de treinta segundos en un semáforo o en una micro, porque no cuentan con las herramientas necesarias para idear sus propias iniciativas.
Es el drama también de los jóvenes de la esquina o del block que siguen «pateando piedras», como decían Los Prisioneros, pese a que ya han transcurrido varios años de democracia.
Debido a esto Juan Eduardo Faúndez, presidente de las juventudes del Partido por la Democracia (PPD), cree que el Instituto Nacional de la Juventud (Injuv) se debe redefinir o bien, se debe crear un organismo que oriente a quienes desean un desarrollo artístico.
Pablo Desbordes, presidente de Nuevas Generaciones (UDI), indicó que su postura es que los fondos no deben tener como intermediario al Injuv, sino que "se pueden canalizar directamente a través de los municipios, ya que ellos son los que mejor conocen las necesidades de la juventud de su comuna"
Por su parte, la directora del instituto juvenil, Claudia Pinto González, dijo que tienen la intención de distribuir de mejor forma los recursos y que incluso se crearán más Infocentros.
Además, Pinto recalcó que los jóvenes sí tienen oportunidades y que es muy fácil postular a los concursos públicos, ya que el único requisito es contar con la participación de 15 personas.
Cuestionan importancia del Injuv
En 1991 se creó el Instituto Nacional de la Juventud, la única entidad gubernamental que está dirigida cien por ciento a este segmento de la población.
Pese a que se cuenta con oficinas en todas las regiones, Faúndez considera que se le ha ido restando importancia a esta institución y que para el gobierno la juventud está en un tercer plano. A esto Jaime Romero, presidente de la Juventud Socialista, agregó que "esta es la única entidad gubernamental a la que se le diminuye el presupuesto cada año"
En 1997 se le destinaron cuatro mil 885 millones de pesos, mientras que este año su presupuesto sólo alcanzó alrededor de dos mil millones. El líder del PPD juvenil recalcó que este dinero es distribuido entre las 13 regiones y casi el 80 por ciento se va en pago de honorarios y en las principales necesidades de las oficinas regionales.
Respecto a esto, la directora del Injuv y el director de la sede en Tarapacá (I), José Miguel Canales, señalaron que la escasez de recursos es importante, pero que ellos lo toman como una oportunidad de autogestionar proyectos y buscar la ayuda de organismos externos.
Pablo Desbordes señaló que el dinero es bastante, pero que el problema es que la existencia de estos departamentos, genera más costos. "Pero lamentablemente el Gobierno crea puestos para que sus adherentes tengan trabajo", indicó.
Oportunidades centralizadas
Injuv cuenta con oficinas a lo largo de todo el país. En éstas trabajan entre tres y siete personas, que adecúan las políticas nacionales para los jóvenes según la realidad de su región.
Por ejemplo, en Tarapacá se segmenta de acuerdo a la edad y a si son de sectores urbanos o rurales, ya que se prioriza la diversidad. "Aquí se desarrollan actividades circenses, hip hop, graffitis, música en todos sus niveles, animé, entre otras cosas que demuestran la innovación y creatividad que existe hoy", señaló el titular de esta dirección.
Por otra parte, en la Región de Magallanes (XII) los jóvenes se sienten pioneros en todos los aspectos. Por eso pese a la escasez de recursos, se encargan de generan sus propios proyectos siendo asesorados por la oficina respectiva.
"La prueba más concreta son las más de 20 producciones musicales que se logran al año en forma independiente", indicó Eduardo Velásquez, productor de acción de Injuv en la Duodécima Región.
Respecto a estas iniciativas, Erick Jara, integrante de una compañía de circo teatro en Santiago -Circópata- sostuvo que gracias a su constancia y a que todos son profesionales, han podido permanecer por largo tiempo participando en diversos eventos, pero destacó que no todos cuentan con los instrumentos necesarios.
"No se saca mucho con tener centros deportivos o de arte, lo que se necesita es que se le entreguen los conocimientos para que ellos puedan desarrollar sus ideas", dijo Jara.
Si bien se cuenta con sedes de Injuv en todas las regiones, y algunos municipios tienen Oficinas Municipales de Juventud (OMJ), los líderes de las diferentes coaliciones coincidieron en que son los sectores rurales los que se ven más afectados, al momento de buscar espacios de entretención y educación.
"Los estudiantes a veces deben caminar dos horas para llegar a sus colegios. ¿Cómo les van a quedar ganas de participar en actividades culturales?", manifestó Romero.
Por último, los jóvenes concertacionistas manifestaron que una de las soluciones a la poca importancia que se le da a la juventud, es que se apruebe la inscripción automática y voto voluntario, porque de esta forma aumentará su participación electoral, y los políticos se verán en la obligación de generar programas orientados a este sector.
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