Rector de la Universidad Católica de Valparaíso, Alfonso Muga, aclaró que el organismo tiene un acuerdo para permitir la coexistencia de dos sistemas de financiamiento. Por lo que rechazó la afirmaciones del rector de la U. de Chile, que recomendó vetar el proyecto de ley porque fomentará, dijo, la discriminación.
El rector Alfonso Muga, rector de la Universidad Católica de Valparaíso, entidad que es miembro del Consejo de Rectores que agrupa a las 25 universidades tradicionales del país, salió al paso de las declaraciones del presidente del organismo, quien ayer expresó a este medio que sería recomendable que el Ejecutivo vete el actual proyecto de ley de financiamiento porque va a generar más discriminación.
Luis Riveros no quiere en la Casa de Bello estudiantes que por un lado van a obtener recursos del Estado -vía Fondo Solidario- al 2 por ciento, mientras que otros tendrán que hacerlo en el sistema financiero al 7 por ciento: "Lo que expresa Luis Riveros es un apreciación que él, como rector de la Universidad de Chile, tiene, pero que no representa la voz de otros rectores y menos la del consejo", sostuvo Muga
Ayer en Concepción continuaron las protestas de los estudiantes de universidades tradicionales, quienes no quieren ser incluidos en la nueva legislación porque sería el comienzo del fin del actual sistema de crédito. Los jóvenes, bajo el lema "el Gobierno está matando la educación", se trasladaron desde la casa central de la Universidad hasta la catedral penquista donde dejaron un ataúd que simbolizaba la "muerte de la enseñanza".
"Discriminación ya existe"
-El rector Luis Riveros señaló la inconveniencia que coexistan dos sistemas de financiamiento en las universidades tradicionales, especialmente porque no quiere que haya alumnos que estudien con distintas tasas de interés. ¿Cuál es su postura?
-Él, en este caso, no está representando al Consejo de Rectores. Nuestro organismo tiene un acuerdo adoptado en su oportunidad que admite la coexistencia de dos sistemas, y que en su momento respaldó la presentación de una serie de iniciativas legales que han permitido ir perfeccionando el sistema de Fondo Solidario de Crédito Universitario. Y se agregaría otra más adelante (proyecto de reingeniería) para poder aprovechar las experiencias acumuladas de algunas leyes de programación e incorporar ciertas disposiciones que permitan sobre todo mejorar la recuperación en materia de cobranza de esos créditos.
-¿A qué fecha se remonta el acuerdo?
-A la época de la ministra Mariana Aylwin, en 2002. Recuerdo que el consejo constituyó una comisión que, creo, estuvo presidida por el vicerrector de la Universidad de Concepción, Alberto Larraín. Claramente, en esa ocasión, el consejo conoció todos los antecedentes y admitió que pudieran coexistir dos mecanismos distintos de crédito, concientes que la existencia de un mecanismo distinto al del fondo tradicional iba a colaborar para despejar la situación de muchos que tenían dificultades para acceder a créditos del tipo Corfo. Un número no menor de estudiantes de nuestras universidades perciben crédito Corfo para poder hacer sus estudios de pregrado.
-Si hay alumnos que ya están estudiando en las universidades del Consejo de Rectores con créditos obtenidos en el sistema financiero -y por ende a tasas más altas que las del Fondo Solidario-, podemos colegir que ya existe una suerte de discriminación…
-Actualmente existen distintas formas de discriminación, incluso hay universidades que tienen constituidas por ellas mismas algunos fondos especiales para poder colocar recursos que provienen de ingresos propios…
-¿Entonces la nueva legislación ordenaría lo que ya existe?
-Efectivamente, lo que hace esta ley es ordenar un conjunto de mecanismos crediticios que habían comenzado a surgir y creo que les da un sentido de mayor integración. Por supuesto que todo nuevo sistema tiene beneficios y riesgos, pero creo que el rector Luis Riveros -a título personal- puso el acento en los riesgos y no en las ventajas.
-Pero, ¿cómo se garantiza a los estudiantes que efectivamente el actual Fondo Solidario no se terminará?
-Pienso que ésa no es la voluntad del Gobierno. Uno siempre puede especular planteando una serie de incertidumbres, pero la voluntad de este Gobierno formalmente declarada es ir abriendo espacios. Por lo que creo que pueden coexistir mecanismos crediticios sin que uno coloque en riesgo el otro, esa es mi percepción. De hecho, la experiencia internacional permite comprobar esto mismo. En los Estados Unidos no hay un solo mecanismo crediticio como tampoco un único sistema de becas. Existen varios, unos más favorables al estudiante, otros menos, pero lo importante es que aquellos que tienen un contenido de subsidio mayor queden más directamente focalizados hacia aquellas familias que tienen más carencias. En este caso, el mecanismo de crédito solidario debería estar orientado a estudiantes de los quintiles dos y tres, mientras que el sistema de crédito nuevo debería estar orientado hacia la parte alta del quintil tres y el quintil cuatro en materia de ingreso de las familias.
-¿Entonces la Universidad Católica de Valparaíso no quiere que se excluya a las instituciones del Consejo de Rectores de la nueva ley de financiamiento?
-Creo que el proyecto de ley no requiere de ningún veto. Entiendo que en la comisión mixta se le harán algunos ajustes, pero no veo a propósito de qué podría necesitarse algún veto. A lo mejor el rector Riveros tiene algunos argumentos que en este momento desconozco y que podrían darle un fundamento a aquello, pero no tiene nada que ver con la coexistencia de los dos sistemas que es posible, y el Consejo de Rectores, insisto en esto, así lo vio.
__
Artículos relacionados:
Rector de la Universidad de Chile recomienda vetar ley de financiamiento (26 de abril de 2005)
