Según el cientista político de la UDP, la pugna entre los dos aspirantes presidenciales de la Alianza por obtener el segundo lugar no hacen más que potenciar la figura de la candidata de la Concertación, Michelle Bachelet. Advierte que si ninguno se baja, lo más probable es que se mantenga la »guerra civil» en la centroderecha.
Aprovechando la tecnología, Patricio Navia asistió desde Nueva York a la entrega de la primera encuesta electoral que esta semana entregó el Instituto de Ciencias Sociales de la Universidad Diego Portales, donde forma parte del staff de investigadores.
La muestra arrojó un virtual empate entre Joaquín Lavín y Sebastián Piñera en la carrera presidencial: el primero con 18,3 y el segundo con 17,2 por ciento. Según Navia, este escenario intensificará la disputa entre la UDI y RN, incluso superior a lo que se ha visto hasta hoy.
La razón de estos roces es que dada la inalcanzable ventaja que muestra la candidata de la Concertación, Michelle Bachelet con 45,6 puntos, ambos presidenciables se trenzan en una guerra para alcanzar el segundo lugar.
"Hay un empate a muerte entre Joaquín Lavín y Sebastián Piñera. Si bien Lavín tiene puntos más sólidos, Piñera tiene un mayor espacio para crecer. Los dos están peleando por el mismo espacio por lo que las zancadillas en la derecha son inevitables", explica este doctorado en Ciencia Política.
– ¿Por qué dice que los dos están peleando por el mismo espacio? Siempre se dijo que Lavín estaba enfocado en los sectores populares y Piñera en el centro.
– Sí, eso es cierto. Piñera es más popular entre los más jóvenes, entre los más moderados, pero lo más importante, es que Piñera es más popular entre la gente que aún no han decidido su voto, que es entre un 9 y 10 por ciento del electorado. Si la mayoría de ellos vota finalmente por Bachelet o por Piñera, entonces éste tendría suficientes votos para superar a Lavín en primera vuelta.
Piñera tiene más espacio para crecer, Lavín está mejor posicionado, pero ambos están virtualmente empatados. Eso significa que ninguno de los dos tiene razones para salirse (de la carrera presidencial) porque ambos creen que pueden ganarle al otro. Cuando se da una disputa así de apretada, lo más común es que al final terminen haciéndose daño mutuamente, porque ambos saben que cada voto que va para su rival es un voto menos para sí mismo.
‘Mientras más pelean, más ventaja obtiene Bachelet’
-¿Este enfrentamiento no juega en contra de los objetivos de la Alianza? Michelle Bachelet está fuera de la línea de fuego, mientras Lavín y Piñera se enfrentan.
-Sí, Bachelet no tiene que hacer nada, tiene que mantenerse al margen de todo esto porque sabe que la pelea es por el segundo lugar, con lo que se consolida ella en el primer lugar. Es un tanto irónico que mientras más disputa y confrontación exista en la Alianza más se consolida el liderazgo a Bachelet.
-¿No es contraproducente esto? Que Lavín y Piñera peleen por los mismos votos, en vez de salir a buscar a Bachelet.
-Si lo que quieren es ganarle a Bachelet la estrategia está mal enfocada, pero si lo que quieren es ocupar el segundo lugar, entonces las zancadillas no son contraproducentes sino que son concordantes con la estrategia de ambos.
-A comienzos de año el espíritu de la Alianza era de acercamiento, las directivas de RN y la UDI habían reanudado sus encuentros periódicos y el discurso se enfocaba en el trabajo.-¿Qué pasó que han cambiado tanto las cosas?¿Fue Piñera el único detonante de esta especie de guerrilla interna?
– No, la entrada de Piñera es el reflejo de un problema más de fondo, que es la imposición por parte de la UDI de su visión de mundo, de su programa a RN. Fue esa actitud la que terminó provocado que RN apoyara el ingreso de Piñera en la carrera presidencial.
‘Lavín no logró poner a la UDI en la lógica de cooperación’
-Pese a ello, el discurso de Lavín y de Piñera en un primer momento es de unidad, de trabajar juntos para derrotar a Michelle Bachelet. Sin embargo se trenzan en disputas mediáticas todas las semanas.
-Lo que pasó es lo siguiente. La idea de que podían colaborar para alcanzar juntos a Bachelet era una buena idea, pero requería que la UDI aceptara la idea de Lavín de que dos candidatos sumaban más y que Piñera aceptara realizar primarias. Dado que ninguna de las dos condiciones se cumplieron, al final esto se terminó convirtiendo en una guerra civil. Pero había una posibilidad de que ambos colaboraran pero, insisto, Lavín no logró poner a la UDI en esa lógica de cooperación y a su vez Piñera no aceptó que se realizaran primarias.
-Eso habla de una falta de liderazgo de Lavín
-Sin duda, el gran problema de Joaquín Lavín fue precisamente su falta de liderazgo. Si Lavín hubiera sido un líder de la UDI de verdad, nada de esto hubiera pasado porque es un candidato mucho más de consenso que Longueira y Novoa. Ambos quieren destruir a Renovación Nacional por distintos motivos, pero dado Lavín no logró imponerse a esa postura más dura, entonces terminamos con una guerra civil al interior de la derecha que está facilitando el triunfo de Michelle Bachelet.
-Uno de los últimos hitos de esa batalla fue la filtración de la investigación a las tierras de Piñera en Chiloé. El comando de Piñera evita a toda costa la confrontación con el gobierno y lo enfoca en el comando de Lavín.
-Esta encuesta demuestra que a Piñera le va mejor entre la gente que aprueba la gestión del Presidente Lagos, que entre la que lo desaprueba. Es decir, Piñera capta más votos blandos de centro y de derecha que Lavín, que son más duros. Entonces a Piñera no le conviene pelearse con el Gobierno porque está buscando la votación de gente cercana con el Gobierno. Este informe refleja la desconfianza que existe en la derecha, porque se podría haber solucionado con cierta facilidad, pero no fue así porque ni Piñera confía en la UDI ni Lavín confía en la gente de Piñera. Entonces resulta muy difícil evitar que la sangre llegue al río. En la derecha la sangre siempre llega al río porque no existe confianza. El argumento de la gobernabilidad es, hoy por hoy, el mejor argumento de la Concertación.
La única forma que puede evitar un triunfo de Bachelet es que Lavín y Piñera lleguen a algún tipo de acuerdo y, de preferencia, que alguno de los dos se baje. Si eso no ocurre, entonces Bachelet va a ganar en forma segura. La controversia sobre este informe demuestra que la derecha está muy lejos de lograr que uno de los dos candidatos se baje.
La encuesta muestra que Lavín y Piñera están empatados. Eso representa una mejora para Piñera respecto de las últimas encuestas. Piñera va de subida, muy lento por lo que no le va a alcanzar para ganarle a Bachelet, pero sí podría alcanzarle para ganarle a Lavín y eso es, aparentemente, lo que más le importa a Piñera en este momento.
-De no haber continuado en esta lógica de conflicto, ¿cree que Joaquín Lavín y Sebastián Piñera pudieron haber subido más puntos?
– Creo que podrían haber subido bastantes puntos si es que hubieran acordado hacer primarias y si hubieran acordado hacer debates, ignorando a Michelle Bachelet, porque ella no habría querido ir. Con ello, podrían decir que ‘nosotros somos los únicos que quieren darle la cara a la gente, Bachelet no quiere hacerlo’. Eso les podría haber ayudado a mejorar su situación en las encuestas. Sin duda habría sido una mejor estrategia que el escenario actual de andarse peleando.
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